Pase después del Referéndum

penocoVarios conflictos sociales, entre ellos la demanda de los transportistas que estuvieron bloqueando durante una semana y los cocaleros de los Yungas que también desafían la paciencia del régimen con un bloqueo carretero, deberán ser resueltos después del Referéndum del 21 de febrero. Los transportistas arruinaron las fiestas de Carnaval en Oruro y los productores de coca están con ánimos provocar el tiro de gracia a la propuesta del “SÍ” en la consulta del próximo domingo. Para colmo, la Central Obrera Bolivia (COB) ha comenzado a hurgar sobre el incremento salarial correspondiente a este año y el ministro de Economía, Luis Arce, ha respondido que ese temita será tratado posterior a la votación prevista.

Un dicho popular llama a esta reacción “patear el tarro” que equivale a postergar constantemente las decisiones, aunque en este caso es una forma de condicionar el voto y presionar a los sectores en conflicto a apoyar al oficialismo. Sin embargo, es la primera vez en mucho tiempo que el Gobierno no está en las mejores condiciones de hacer promesas ni siquiera a corto plazo. Lo que ocurra después del referéndum forma parte del mar de incertidumbres que nos amenaza.

Fuente: www.eldia.com.bo