Rusia alerta de que el mundo se aproxima a una nueva guerra fría

Kerry reclama a Moscú que cese los bombardeos en Sira contra civiles y opositores a El AsadEl primer ministro ruso, Dmitri Medvédev saluda a su homólogo francés, Manuel Valls, en la cumbre de seguridad de Múnich.

El primer ministro ruso, Dmitri Medvédev saluda a su homólogo francés, Manuel Valls, en la cumbre de seguridad de Múnich. Lennart Preiss Getty Images

El deterioro de las relaciones entre Rusia y Occidente propiciadas por crisis como la de Siria y Ucrania se agrava hasta el punto de que el primer ministro Dmitri Medvédev alerta de un escenario cada vez más parecido a la guerra fría que dividió al mundo durante la segunda mitad del siglo XX. “La política de la OTAN hacia Rusia es poco amistosa y terca. Para ser sinceros, nos estamos desplazando rápidamente a un periodo de una nueva guerra fría”, ha asegurado el sábado Medvédev. El primer ministro añadió se siente confundido, ya que, según dijo, a veces no sabe si vive “en 2016 o en 1962”.



El duro discurso pronunciado por Medvédev en Múnich -donde este fin de semana se celebra la Conferencia de Seguridad que reúne a un centenar de jefes de Estado, de Gobierno y ministros- ha chocado con los reproches hacia Moscú lanzados por buena parte de los líderes occidentales que participan en el mismo foro. “La inmensa mayoría de bombardeos rusos van dirigidos contra grupos de la oposición legítimos. Esta situación debe cambiar”, dijo el secretario de Estado de EE UU, John Kerry.

“Todos sabemos que para regresar al camino de la paz, los bombardeos rusos contra civiles debe terminar”, dijo el primer ministro francés, Manuel Valls. Su homólogo ruso, que participaba en el mismo debate que Valls, negó la mayor. “Pese a que todo el mundo nos esté acusando de ello, no hay ninguna evidencia de que bombardeemos civiles. Simplemente es falso”, dijo Medvédev, un comentario que sorprendió a varios de los presentes.

 Medvédev ya había calentado el ambiente antes de llegar a Múnich. En plenas negociaciones de paz de Siria –que en la madrugada del viernes alumbraron un frágil alto el fuego para la próxima semana-, el primer ministro ruso había alertado en una entrevista al periódico alemán Handelsblatt de los riesgos de caer en una “guerra permanente” o incluso mundial si no se buscaba una solución al conflicto sirio. En su discurso del sábado, Medvédev pidió un compromiso para aumentar la cooperación militar –dijo que Estado Islámico debe estar agradecido a Occidente por no haber querido cooperar-, luchar contra el terrorismo e impedir la desintegración de Siria.

Pese a los grandes desafíos a los que se enfrenta el mundo, Kerry quiso ser optimista en su discurso en Múnich. El jefe de la diplomacia estadounidense cree que ahora se ha abierto la posibilidad para detener la guerra en Siria. “Espero que esta semana pueda ser de esperanza. Este es el momento. Las decisiones de los próximos días y semanas pueden acabar la guerra en Siria», aseguró.

 Fuente: elpais.com