1. Despectiva
Si en la escuela traías una nota alta, te preguntaría por qué no trajiste la nota máxima. Si traes la nota máxima, se quejaría de que no eras una buena atleta.El problema con este tipo de madre es que al crecer, sus hijas suelen sentirse poco valoradas y poco seguras de sí mismas.
2. Controladora
Estas madres suelen criar hijas que se sienten inseguras e indefensas.
3. Inaccesible o ausente
Las actitudes van desde la falta de contacto físico hasta ignorar las necesidades del niño y, por supuesto, el abandono real.Esto suele causar en los hijos un hambre emocional insaciable, y que se sientan necesitados desesperadamente.
4. Enredadera
Este tipo de madre no reconoce los límites entre su vida y la de sus hijos, por lo que sigue estando presente e interviniendo cuando debería dejarlos hacer su propia vida.
5. Combativa
Sus hijos suelen sufrir de culpa y vergüenza exagerada cuando llegan a adultos.
6. Inestable
La madre inestable es una de las que más confunden y dañan a los niños, porque no les permite desarrollar una relación emocional estable.
7. Egoísta
Un claro ejemplo de este caso es la madrastra de Cenicienta, que usaba a su hijastra para sus propios fines.Si tuviste una madre tóxica, identificarlo te ayudará a mejor si ahora de grande tienes problemas para relacionarte, así como también a evitar convertirte en una.Fuente: www.imujer.com