Ecuador: su esposa compró ataúd, pero él sobrevive bebiendo orina

Increíble. Mientras su esposa lo lloraba y buscaba entre los escombros del hotel que administraba en la ciudad de Portoviejo, una de las más afectadas por el terremoto de 7.8 grados de magnitud que azotó el sábado 16 de abril el vecino país de Ecuador, Pablo Córdova, un hombre de 51 años, estaba atrapado entre los escombros de la construcción.Así sin saber qué hacer, cómo pedir ayuda y demás, Pablo Córdova pasó 40 horas bajo tierra bebiendo su propia orina para poder saciar su sed y sobrevivir. Afuera, libre de peligro, estaba Sonia Zambrano, su pareja, quien había perdido toda esperanza de encontrarlo vivo así que resignada decidió comprar su ataúd.

INICIA EL MILAGRO

Cuando los cinco pisos del hotel El Gato, sitio donde trabaja Pablo Córdova desde hace dos décadas, cayeron y todo se volvió oscuridad, él esperó el rescate de los bomberos y nunca dejó de mirar su celular, pieza clave para su ubicación.“Soy al único que han encontrado vivo y creo que es un milagro”, dijo, señalando que en medio del desastre encontró bajo sus piernas una linterna y la batería de su viejo celular.De inmediato lo cogió es esperó por varias horas que entrara la señala para poder llamar a alguien y pedir ayuda. Por suerte tenía saldo en el teléfono.“¡He vuelto a nacer! Pero mi mujer ya me estaba organizando el veloro. Gracias a Dios tengo vida y un ataúd que debo devolver porque aún me falta mucho para morirme”, declaró. 

 MIRA EL VIDEO COMPLETO DE ESTA HISTORIATestimonio de Pablo Córdova por ecuavisaFuente: peru.com