SIP condena acusaciones del Gobierno boliviano contra los medios

El presidente de la Comisión de Libertad de Prensa de la SIP, Claudio Paolillo, lamenta que usen la vieja práctica de intimidación.SIP condena acusaciones del Gobierno contra los mediosArchivo. Periodistas entrevistan a Zapata después de una audiencia.Página Siete / La PazLa Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) expresó su preocupación y condenó las amenazas de autoridades del Gobierno boliviano contra periodistas y medios de comunicación, a los que descalificó públicamente y amenazó con enviarlos a prisión.El presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información de la SIP, Claudio Paolillo, condenó «la vieja práctica de intimidar a los periodistas y descalificar a los medios, cuyo objetivo es disuadir que se informe sobre asuntos de interés público”, señala el comunicado de esta entidad.Paolillo, también director del semanario uruguayo Búsqueda, añadió: «Condenamos profundamente que el Gobierno siempre intente estigmatizar a la prensa, llamándola ‘cártel’, como si se tratara de bandas de delincuentes, justificando así procesos penales que no se compadecen en nada con lo que estipula la Ley de Imprenta vigente en el país, y los principios interamericanos sobre libertad de prensa”.La condena del SIP se da luego que el 15 de junio  el vicepresidente Álvaro García calificó a opositores, medios de comunicación y abogados como una «mafia mediático-política” y los acusó de encabezar una «conspiración” contra el presidente Evo Morales y amenazó con aplicar «la ley a todos esos mentirosos”, en referencia a periodistas y medios que informaron sobre Gabriela Zapata, la expareja del presidente Evo Morales.En esa oportunidad, García Linera se refirió en específico a la Agencia de Noticias Fides (ANF) y a los diarios El Deber, Página Siete y a Erbol.El 19 de mayo, en sesión de interpelación en la Asamblea Legislativa, el ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana,    afirmó que esos cuatro medios de comunicación formaban parte de un «cártel de la mentira”.A Carlos Valverde, quien el 3 de febrero denunció un presunto tráfico de influencias Gobierno – CAMC, porque su gerente Gabriela Zapata era pareja y tuvo un hijo con el presidente Evo Morales,  lo calificó de mentiroso y vinculado a intereses externos. Mientras tanto, a los periodistas Amalia Pando y Andrés Gómez los acusó de estar asociados a un plan de desestabilización.En mayo, Valverde abandonó el país ante las amenazas por haber realizado las denuncias. «Ahora sí, aviso que estoy en Buenos Aires, Argentina, no estoy asilado, estoy ‘a resguardo’; la presión política (Quintana y Marianela Paco sobre todo, tras de la interpelación y con de prensa respectivamente) era muy fuerte, de manera que haciendo caso a amigos y compañeros periodistas, decidí tomar distancia”, publicó Valverde el 27 de mayo en su cuenta de Facebook.Días antes salió del país el director del periódico Sol de Pando, Wilson García Mérida, luego de que el Ministro de la Presidencia le inició un proceso judicial por «sedición”.