Arturo Yáñez CortesFiel a su doctrina Morales, el gobierno le metió nomás y acaba de celebrar los fastos de inauguración de la producción del Campo Incahuasi, pese a que está en trámite un procedimiento de conciliación de límites entre Chuquisaca y Santa Cruz que hasta donde se conoce, gravitaría significativamente en la pertenencia del campo, apresurada e improvisadamente declarada por el momento. Con la prepotencia y torpeza que caracteriza al gobierno, las autoridades chuquisaqueñas no fueron invitadas al acto e incluso, los cívicos chaqueños del departamento que pretendieron asistir, fueron impedidos por los amarrawatos verde olivo de costumbre.No es que a l@s chuquisaqueñ@s nos sorprenda ese accionar del gobierno, puesto que no es la primera vez y me temo, tampoco será la última; es más, podrido como está de populismo, está claro que Santa Cruz tiene más votos, poder económico y político, por lo que por mucho que “nuestros representantes” (entre comillas) sean del oficialismo, con aún mayor evidencia que en otras, les ha sido imposible ocultar que sólo representan y acatan la omnímoda voluntad de su amo… “su departamento”, “sus electores” y “su pueblo” al carajo.El tratamiento ha llegado a tal extremo, que las autoridades que discursean representar al departamento, no fueron siquiera invitadas y ellos… bien gracias. El “gobernador” que arrastra el lastre de su ilegitimidad, dijo que ya tenía otras actividades programadas en Zudañez (le faltó poco reaccionar chavísticamente, diciendo: “al cabo que ni quería”…) pese a que es el principal responsable de la mediocridad e improvisación con la que se ha procedido en el caso Incahuasi; el Alcalde sigue haciendo aguas con su pobre gestión (aunque a muchas familias les sigue faltando agua en la ciudad); los Consejos Municipales y Departamentales no dijeron ni miau; la Universidad, otrora combativa, se borró del mapa extraviada en sus roscas y del Comité Cívico, mejor ni escribir, al estar enterrado por obra de su sepulturero, actual senador (por supuesto, del oficialismo). La brigada parlamentaria??? Existe… sí, pero sólo para amarrarle los watos a su jefazo.Semanas atrás en este mismo espacio de opinión, había preguntado con motivo de este conflicto, precisamente si nuestras autoridades iban a dar la talla anteponiendo los intereses de “sus representados” a su ovejuna disciplina partidaria. Los hechos y la resultante indefensión chuquisaqueña, aunque a muy pocos sorprenden, nos indignan sospecho a tod@s. Confirmando eso de Howe: “Nadie puede adoptar la política como profesión y seguir siendo honrado”, quedaron en evidencia esas mentiras electoreras que prometían que la ciudad y el departamento al tener autoridades de la misma línea del oficialismo, lograrían trato diferente de los actuales dueños del país, a diferencia de otras anteriores –hoy perseguidas cobardemente por “la justicia”- que como no entraron al redil, sus gestiones fueron torpedeadas sistemáticamente por el poder central. Mintieron también, anunciando que la confrontación no nos iba a traer resultados, que había que hacer empanaditas con el gobierno: ¿la vergonzosa sumisión de “nuestros representantes” ha conseguido algo? Sólo sobras del opíparo banquete que disfruta el eje.Por tanto, el resultado ha sido peor que la enfermedad, ya que consumada la toma de la Gobernación (ilegítimamente); de la Alcaldía; de la Brigada Parlamentaria, del Comité –ahora cínico, otrora Cívico- y de cualquier otro espacio de poder, ninguna de esas instancias está en la capacidad de sacarle la lengua siquiera a su amo y Cía, por mucho que los daños a los intereses del departamento, sus actuales habitantes y los futuros, sean cuantiosos; es que: “La verdad, es el alma de los honestos, la mentira, la de los cobardes y la traición la de los miserables” (anónimo).