Los descendientes de Frankenstein acabarían con la humanidad, según un estudio

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Si el monstruo de Mary Shelley se hubiera podido reproducir, sus vástagos habrían eliminado la humanidad en unos 4.000 años, afirma un reciente estudio.Investigadores de la Universidad de Dartmouth (EE.UU.) han calculado el plazo de tiempo en el que los humanos habrían sido exterminados si la fantasía literaria de Mary Shelley hubiese tenido descendiencia, informa The Telegraph remitiéndose a un estudio publicado en la revista BioScience.La extinción del ser humano se habría producido en unos cuatro mil años, afirman los científicos, deseosos de resolver un debate literario que nació con la publicación de la novela en 1818: ¿qué pasaría si Víctor Frankenstein hubiera permitido vivir en libertad a su creación y a una compañera con la que pudiera reproducirse?El conflicto habría sido inevitable por el principio de ‘exclusión competitiva’: la rivalidad que habría nacido entre el hombre y los descendientes de la monstruosa criatura, condenados a competir por los recursos del ecosistema común.»El principio de exclusión competitiva no se definió formalmente hasta la década de 1930«, explica Nathaniel J. Dominy, profesor de antropología y ciencias biológicas en la Universidad de Dartmouth.»Partiendo de este concepto fundamental, en nuestra investigación utilizamos herramientas computacionales para aclarar si una creciente población de criaturas como la de Frankenstein hubiera podido conllevar la extinción de los seres humanos», dijo.La idea de tal extraño estudio se le ocurrió a científicos partiendo de un capítulo de la novela. En este, el monstruo pide a su creador que cree a una acompañante para él y que les deje establecerse en América Latina: «Si accedes, ni tú ni ningún otro ser humano nos volverá a ver. Me iré a las enormes llanuras de Sudamérica. Mi alimento no es el mismo que el del hombre; yo no destruyo al cordero para saciar mi hambre; las bayas y las bellotas son suficiente alimento para mí. Mi compañera será idéntica a mí, y sabrá contentarse con mi misma suerte», pide el protagonista a su creador, que finalmente se negara a ello por miedo a las posibles consecuencias.Fuente: actualidad.rt.com