Escándalo «Rasputina»: la presidente surcoreana destituida por corrupción pidió perdón y cedió el poder

El parlamento de Seúl votó a favor del impeachment contra Park Geun-hye por su implicación en un caso de sobornos. La líder conservadora se disculpó por ser “negligente y causar un caos nacional”. El poder quedó en manos de Hwang Kyo-ahn

Park Geun-hye le entregó el poder al primer ministro Hwang Kyo-ahn (Reuters)

La presidenta de Corea del Sur, Park Geun-hye, se disculpó este viernes ante los ciudadanos en un discurso televisado tras entregar todos sus poderes al primer ministro, Hwang Kyo-ahn, después de que el Parlamento aprobara su destitución por su implicación el escándalo de la «Rasputina».

«Quiero disculparme ante todos los surcoreanos por este caos nacional que he creado por mi negligencia, en momentos en que nuestro país afronta tantas dificultades, desde la economía a la defensa nacional» declaró Park.



También aseguró que «toma en serio las voces de la Asamblea Nacional y del pueblo» en el discurso emitido tras una reunión con su gabinete, sólo una hora después de que el Parlamento diera el «sí» al «impeachment» por mayoría abrumadora.

El primer ministro surcoreano, Hwang Kyo-ahn, realiza una llamada de emergencia a los ministros de Defensa, Asuntos Exteriores e Interior (EFE)

También instó a los ministros y al nuevo líder provisional del país a «hacer todo lo posible para minimizar los vacíos en el gobierno, especialmente en los ámbitos de economía y seguridad», hasta que el Tribunal Constitucional dé el veredicto final sobre su destitución.

Park, de 64 años, fue separada de su cargo mediante una moción de censura. Es la primera presidenta surcoreana elegida democráticamente que no termina su mandato de cinco años.

El «sí» al proceso de destitución ganó con 234 votos a favor, 56 en contra y 9 abstenciones y votos nulos poco más de una hora después de comenzar la sesión en la que votaron 299 de los 300 representantes de la Asamblea Nacional.

Una multitud protesta ante la Asamblea Nacional en Seúl minutos antes del voto a favor de la destitución de la presidenta surcoreana, Park Geun-hye (EFE)

Ahora el Tribunal Constitucional deben dar el visto bueno a la decisión del Parlamento, en un proceso que llevaría 180 días como máximo. Al menos 6 de sus 9 jueces deben votar a favor para confirmar la destitución.

En tanto, la presidenta fue desposeída inmediatamente de todos sus poderes al frente del Estado, desde el control del Ejército hasta el derecho a veto o decisiones de política exterior.

Fuente: infobae.com