«Enfrento este proceso injusto sin rencor ni odio, entiendo que es el precio que hay que pagar por denunciar la corrupción de este Gobierno, por oponernos a la reelección. Pero es un precio que hay que pagar por el bien del país, tenemos que recuperar la democracia, tenemos que construir una nueva Bolivia, con esperanza y sin corrupción», dijo anoche el líder de Unidad Nacional, Samuel Doria Medina, al concluir la audiencia de medidas cautelares.
El caso Focas, por el que es enjuiciado, se refiere a las gestiones administrativas que hizo Doria Medina cuando fue ministro de Planeamiento en 1991.Específicamente, Focas fue creada con un préstamo otorgado por EEUU a Bolivia y convertido en Fundapro, un fondo para dar préstamos a pequeños productores. Uno de los argumentos de Doria Medina es que la acción penal ha prescrito al haber transcurrido 26 años y que no existió daño económico al Estado.Sin embargo, la Asamblea Legislativa impulsó la denuncia porque presuntamente el opositor, en 1992, suscribió un contrato de préstamo de $us 21 millones de dinero de Focas a favor de Fundapro con un interés menor al que pagaba el Estado a sus acreedores.
Fuente: El Deber