Jorge Arias Lazcano, presidente de CAINCO, señaló que este incremento salarial del 7% y un 10,8% al Salario Mínimo Nacional generan una fuerte carga para los empresarios, que tendrán dificultades en hacer efectivo este pago.Manifestó que la medida asumida entre la Central Obrera Boliviana y el Gobierno, sin la participación del sector empresarial, está por encima de la inflación y del nivel de crecimiento de nuestra economía. Resaltó que estamos viviendo una desaceleración económica donde muchas empresas han comenzado a sentir una reducción en sus ventas. “Sobre todo el efecto será mucho más fuerte en las medianas y pequeñas empresas que por el giro de sus negocios contratan mucha mano de obra y que no cuentan con el suficiente respaldo financiero para soportar un incremento de estas magnitudes”, apuntó.Además el presidente de CAINCO manifestó que estos incrementos abren las puertas a una mayor informalidad en el país y las empresas, debido a estas medidas salariales desequilibradas, se verán limitadas para generar las nuevas fuentes de empleo que tanto necesita nuestro país.Por otra parte estos incrementos están muy por encima de los niveles de productividad en Bolivia, lo cual es muy importante al momento de hablar de crecimiento de nuestra economía. Por esta razón sus efectos no aportarán a la reactivación económica que tanto necesita nuestro país en el marco de esta coyuntura de desaceleración.Como ya se había señalado anteriormente, el efecto de estos incrementos además tienen un fuerte impacto porque vienen conectados a los bonos y otras obligaciones sociales que los empresarios deben hacer efectiva.En ese sentido, señaló que desde 2005 los empresarios han tenido que incrementar el Salario Mínimo Nacional en 310%. “En términos efectivos subió de Bs. 440 en 2005 a Bs. 1.805 en 2016, lo que implica un incremento de 310%, porcentaje que si se descuenta el efecto de la inflación llega a 116%. Con el incremento del 10,8% el Salario Mínimo llegará a los Bs. 2.000, lo que incrementará aún más los bonos que debe pagar el sector empresarial”, indicó.Sumando los bonos asociados al Salario Mínimo Nacional, Arias expresó que el empresario tiene que erogar casi Bs 8.400 millones para el pago de estos beneficios sociales, sin tomar en cuenta este último incremento, lo cual sumando a las obligaciones tributarias y a los gastos propios de los negocios, generan una fuerte carga para las empresas.Fuente: Cainco