Cientos de peregrinos llegan hoy a los pies de la Virgen

Marcelo Tedesqui V.



Delegaciones de promociones  de colegios, grupos de amigos, familias enteras o hasta personas que caminan en ayuno o con voto de silencio como un acto de fe son hechos que marcan la peregrinación al santuario de la Virgen de Copacabana, a la que llegarán hoy centenares de peregrinos. 

El recorrido es un desafío que dura dos días si se va a buen paso. “El problema principal, al recorrer los kilómetros, es el peso de la mochila y las ampollas, que deben coserse. Es decir, lo que se hacía desde la época de mis abuelos es mojar el hilo con yodo, pinchar la bolsita (la ampolla) por un lado, la sacas por el otro, mojas con el hilo el centro de la herida. Así la desinfectas, aunque gritas, porque arde mucho. Pero listo, no molestará más. Solo después puedes echarte a descansar”, dice don José Luis, un antiguo peregrino. “Antes esa curación la hacíamos nosotros mismos, ahora pagas unos pesos y te la hace la Cruz Roja”.

Jorge hace una promesa de silencio y no habla mientras camina, su hijo explica que van años de lo mismo, y que lo edifica mucho. “Sé que hay otras personas que hacen ayuno”, complementó. Los peregrinos experimentados explican que se puede ir por la ruta de asfalto hasta Tiquina. Otros desvían por Peñas, y bordean el lago, hay quienes hacen incluso un tramo en bote. “Para mí, mientras más sacrificio hagas es mejor, pero puedes acortar, hacer chanchullo”, dice un joven. Esa primera parte del recorrido es la más complicada.

Los expertos dicen que quien llega al estrecho de Tiquina sin tomar un minibús, tiene muchas posibilidades de completar el desafío. Desde ahí queda una subida, el último esfuerzo. Pero cuando se llega a la cima del cerro, comienza el descenso final que se hace por una senda empedrada que, según las creencias, esas que pasan de generación en generación, fue dejada por los ancestros, hablan incluso de los incas.La Policía desplegó 300 efectivos en el recorrido, se repartieron en dos turnos que controlaron la seguridad de los peregrinos las 24 horas, en siete puntos de control. Al salir, les pusieron manillas fosforescentes para que sean vistos por los vehículos durante la caminata nocturna.  La preparación comienza en La Paz, el viernes de la semana posterior al Carnaval y durante todos los días de la cuaresma en la madrugada. Desde distintos puntos de la ciudad, los peregrinos caminan hasta la Iglesia de la Exaltación, en la zona de Obrajes.

SucreLa religiosidad del pueblo católico y la gastronomía particular de la Semana Santa se destacan en estas fechas en Sucre y Chuquisaca. La tradición dice que hoy se tiene que comer 12 platos, pero las familias alcanzan a preparar un ají de arveja, arroz con leche, locro de zapallo con queso, humintas y ají de papaliza. Los vecinos de cada barrio, los familiares, todavía acostumbran intercambiar sus comidas, así es que uno puede probar un poco de al menos siete comidas distintas 

Fuente: eldeber.com.bo