Neymar es una estrella mundial. Tiene todo lo que sueña cualquier joven que quiere ser futbolista: vive de lo que ama, dinero, fama. Todo. Pero hay algo que el crack brasileño mantiene desde que era apenas un pequeño y que nunca cambió en nada: su fe inquebrantable en Dios. Practicante del pentecostalismo, el N°10 de Brasil es seguidor de la Iglesia Bautista Peniel de San Vicente y hasta sigue aportando el “diezmo”. Eso sí, en su caso, lo que dona no es un 10% de su sueldo: “Si fuera así, estaría viendo una iglesia diferente», bromeó hace unos años el hijo del pastor.Pero ese pastor no es cualquier pastor. Se llama Newton Lobato y mantiene una estrecha relación con Neymar. No sólo porque lo bautizó en 2008, cuando tenía apenas 16 años, sino además porque fue el que, según una revelación divina, le dijo que sería una gran estrella mundial. Sí, creer o reventar, pero fue así. Incluso, la historia es mucho mejor de lo que parece.
Neymar tenía 14 años y, como todos los sábados, estaba escuchando muy atento el sermón del Pastor Newton. De repente, el líder espiritual de la colectividad frenó su discurso y lanzó una profecía que dejó atónitos a los más de 600 fieles que estaban presentes. «Dios se me presentó y me dijo que este adolescente -señalando a Neymar– será uno de los mejores jugadores del mundo». ¡Vaya declaración divina!La relación sigue siendo tan estrecha como en aquellos años. Incluso, durante el Mundial de Brasil 2014, el Pastor reconoció que se enviaba mensajes de WhatsApp con el crack brasileño. «Tomo un texto de las Escrituras, se lo envió y después compartimos sobre eso, dándole palabras de ánimo para que soporté el momento que está viviendo», confesó Newton, poco después de la lesión que terminó marginando al N°10 de la competencia. Fuente: Pasión Fútbol