Ola de estafas electrónicas con el cuento del “pariente varado

Un familiar manda un mensaje diciendo que está en un aeropuerto sin equipaje y sin dinero. Pide un préstamo y un depósito a una cuenta móvil. Todo es falso. Imagine que vía WhatsApp recibe el mensaje  de un familiar que radica en el exterior pidiendo su ayuda. Él o ella le cuenta que  ha perdido un vuelo y está varado en algún aeropuerto; además, necesita recuperar sus maletas que contienen valiosos equipos o dinero. Imagine que el pariente le ruega que deposite cierto monto a una cuenta móvil para ayudarlo.  ¿Lo haría?“No lo haga antes de verificar la autenticidad del mensaje” alerta la Policía ante la reciente ola de estafas electrónicas con el “cuento del familiar varado”. En la última semana, la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) de La Paz recibió  siete denuncias de víctimas  de esta modalidad de fraude.“Esta semana hemos abierto siete casos de afectados por estafas que van de  500 a   1.000 dólares.Estamos  investigando estos delitos que consideramos modernos y queremos alertar a la población para que no sea víctima de los delincuentes”, informa el jefe de la unidad de Delitos Económicos Financieros de la FELCC,  Freddy Vargas Gutiérrez.El sábado pasado, A. Flores recibió un mensaje de WhatsApp de su cuñado que vive en Buenos Aires. Le contaba que viajaba a La Paz, que había perdido su conexión  aérea en Santa Cruz y que precisaba un préstamo para recuperar sus maletas en las que tenía computadoras y celulares.“No tenía registrado el número  pero tenía   código de Argentina y el remitente aparecía con la foto de mi pariente”, relata Flores. Dice que le extrañó  la parquedad de la comunicación  pero la atribuyó a  la situación. “Le pregunté cómo estaba mi hermana y él respondió que bien y que ya me contaría   cuando llegue a La Paz”.El supuesto cuñado le pidió primero  650 bolivianos que -argumentó- debía pagar a “un licenciado encargado del equipaje” para recuperar su maleta. Inmediatamente, el referido licenciado, que dijo apellidar Pinedo, se comunicó con la víctima -también vía WhatsApp- y le dio un número de cuenta de Tigo Money. Flores hizo el depósito.A los minutos recibió otro mensaje del presunto familiar. Esta vez le contaba que su maleta había sido retenida porque traía equipos tecnológicos y  que ahora debía pagar 1.200 bolivianos de multa para no perderla. “Ahí me di cuenta de que se trataba de una estafa”, cuenta la víctima.Llamó entonces a su familia en Buenos Aires y comprobó sus sospechas: su cuñado estaba en casa, nunca viajó a Bolivia. “Me sentí muy mal por caer en la trampa; pero inicialmente no pensé sino en ayudar a mi familiar”, evalúa ahora.Estafas similares se  registran desde hace meses en todo el país; sin embargo, las denuncias se incrementaron en las últimas semanas . En todos los casos el modus operandi  es el mismo: un pariente dice  que está varado en un aeropuerto, sin  equipaje y sin dinero. Pide entonces un préstamo, vía cuenta electrónica, para solucionar el “inconveniente”.“En general, las víctimas son estudiadas a través de las redes sociales. Ven, por ejemplo, si publican  fotos o comentarios de sus parientes en otros países en Facebook. Así consiguen nombres para armar la historia”, refiere  Dante Fernández,  investigador de la FELCC.En los casos denunciados hasta ahora, la mayoría de los mensajes provienen de teléfonos con códigos del exterior;  las cuentas en las que  se realizan los depósitos  tampoco están en el país, explicó  Vargas.El pasado lunes, el video-blogger  paceño Simón Ruiz Paz Corrales  publicó en su página de Facebook “Simón Dice” el registro del  intento de esta modalidad de fraude.  “¡Tengan mucho cuidado! Me llamaron de un número internacional y todo comenzó a ponerse raro. Más bien logré captar en video toda la experiencia y  se las muestro para que tengan mucho cuidado”, escribió.Simón presenta en el video los mensajes de WhatsApp que recibió de una supuesta amiga de nombre Alisson que -le dijo- “llegaba de sorpresa a Bolivia” pero había perdido su vuelo y  estaba en el aeropuerto de Ezeiza, Buenos Aires. Siguiendo el guión, añadió que su maleta ya había partido a  Santa Cruz.“En la maleta azul tengo mi dinero, que son 12.000 dólares y en la caja tengo tres computadoras portátiles, cinco teléfonos celulares y dos cámaras fotográficas” sostuvo, y le pidió el favor de recoger su equipaje.Después le dio el número de un  “responsable del equipaje” quien al rato  llamó por teléfono a Simón.En el registro, se escucha cómo el estafador le  pide   un depósito de 713 bolivianos para recuperar las maletas: “Si no cancela en una hora,  puede ser  multado con 3.500 bolivianos” advirtió.Simón, que había seguido la corriente  a los estafadores, finalmente preguntó: ¿Le funciona esto? “Funciona pues, si ya te han tumbado… No te hagas al gil” -y cosas peores- fue la respuesta. tome   precauciones1En caso de recibir una solicitud de ayuda económica de un familiar o amigo  que radica en el exterior, como  primera medida, verifique que éste sea auténtico. “Haga la llamada al país  donde radica el familiar para comprobar si éste ha viajado. Trate de hablar con él o ella o con sus más  allegados.  Una llamada internacional puede evitarle una estafa de montos mayores”, recomienda Dante Fernández,  investigador del área Económico-Financiera de  la FELCC. Si   aún comunicándose con el pariente que supuestamente pide su ayuda  tiene dudas,  pregúntele algo que sólo un cercano puede conocer, quizás alguna referencia de índole familiar. 3 También puede corroborar los datos   con  las empresas aéreas. En esta modalidad de estafa, los delincuentes se hacen  pasar por funcionarios e inventan puestos o cargos que no existen en las operadoras de vuelo.Esté atento a situaciones sospechosas. La primera, es recibir un mensaje de un número desconocido con el nombre de un familiar o conocido. La segunda, los delincuentes usan códigos telefónicos internacionales e incluso clonan fotografías de las redes sociales para crear cuentas falsas. Sospeche si se le  pide efectuar un depósito en una cuenta digital o si le piden dinero en cualquier situación.5  Tenga cuidado con los datos que publica en las redes sociales. Evite que su teléfono o dirección estén a  disposición de cualquier usuario de Facebook, por ejemplo.  Es recomendable también que proteja sus fotos. Es de  las RRSS de donde los estafadores  normalmente consiguen fotos y datos de  familiares que radican en el exterior o están de viaje.6 Otra  variante muy similar a  esta  modalidad de estafa  es  la del “familiar en problemas en el exterior”. En este caso, una vez que los estafadores cuentan con la información necesaria,  se comunican con los   familiares en Bolivia y les informan que el viajero sufre algún percance en otro país: está preso, ha sufrido un robo  o está en el hospital. Los estafadores piden que para ayudar a su pariente, las víctimas hagan un depósito en cuentas móviles. Todo es falso.Fuente: paginasiete.bo