Obispos bolivianos no han dudado en tildar de hipócrita e irónica la visita del presidente Morales al papa Francisco, encuentro que el mandatario calificó como “de un padre con un hijo”. Debe ser el hijo pródigo, pues a juzgar por los líderes católicos del país, mientras el Gobierno boliviano trata de mantener buenas relaciones con el Vaticano, el “proceso de cambio” sigue en su avance por despenalizar totalmente el aborto a través de figuras que amplían las causales para interrumpir el embarazo. Este es un aspecto fundamental para la Iglesia Católica en todo el mundo y respecto al tema Evo Morales dijo en tono socarrón que el Papa ni siquiera le preguntó por el aborto y solo le confesó que está orando mucho por él. Pero aparentemente esa indirecta no llegó a buen destino.
Fuente: eldia.com.bo