Juan Carlos Salvatierra aseguró que a sus 36 años está en su mejor momento. El próximo año se inscribirá en coches o cuadriciclos. En esta ocasión se puso como objetivo cumplir uno de sus sueños, ganar etapas.
Su motivación es única, los que lo conocen saben que está en su mejor momento, afirmación que el mismo piloto se encarga de repetir una y otra vez. Juan Carlos Salvatierra pretende sorprender nuevamente en su octava participación en el Dakar, tal como lo hizo en 2017, con el décimo puesto. En esta ocasión se puso como objetivo cumplir uno de sus sueños, ganar etapas. Chavo también reveló que será su última participación en motos, pues en la próxima versión pasará a correr en cuatro ruedas, cuadriciclos o coches.
¿Tu octavo Dakar cómo te encuentra?
En todo aspecto me encuentro mejor que nunca, principalmente porque año tras año voy aprendiendo cosas y voy mejorando detalles en equipo, en la moto y en mi preparación. El entrenamiento, dedicación y sacrificio que le metí durante todo el año ha sido igual que en mis anteriores participaciones, pero la diferencia es que he aprendido a ser más efectivo en los entrenamientos y en los ejercicios. Este año también he preparado un equipo íntegramente boliviano que me va a dar toda la asistencia, a diferencia de otros años que alquilaba un equipo KTM de apoyo.
¿Estás preparado para sorprender nuevamente en esta versión, así como lo hiciste en 2017 con el décimo puesto?
Totalmente y ese también fue uno de los motivos principales para decidir cambiar de modelo de motos, la KTM rally por una KTM de motocross enduro, y a patir de ahí prepararla para correr el Dakar. Sentía que necesitaba este cambio para poder progresar más en mi nivel, velocidad y ser más competitivo cerca de la punta.
Estás más delgado…
Estoy buscando estar mejor porque mientras más te acercas a la punta tenés que hilar más fino. Hemos trabajado el aspecto físico para tener más resistencia y más fuerza. Para ello cambié un poco la metodología de entrenamiento y la alimentación, teniendo controles más rutinarios para ver que se esté progresando. Muchas veces puede pasar que uno esté entrenando, haciendo el esfuerzo, pero si no hay resultado, la verdad que lo que se está haciendo no está funcionando. En optimizar el tiempo que le dedico al entrenamiento tuve mucho cuidado.
¿Estás más tranquilo?
Sí, hasta yo mismo me he sorprendido, pero creo que es por la cantidad de entrenamiento que hemos hecho este año para estar aquí y eso me da una total tranquilidad, sabiendo también que llevo una moto de la que voy a disfrutar mucho. Es más liviana y me va a ayudar bastante sobre todo en las partes de dunas y en las técnicas de piedra y mucha montaña, donde 30 kilos menos es una gran diferencia.
¿Estas listo para medirte de igual a igual con los otros pilotos de punta, los que representan a marcas mundiales?
Totalmente. La idea es desde la primera etapa salir a fondo para estar adelante y no regalar nada. Para estar en punta esa es la única manera.
El nivel es tan alto y competitivo en los últimos años, que no hay chance de relajarse y decir voy a tomarlo con calma y mañana acelero, por ello venga lo que venga hay que salir a fondo en la moto.
¿A los 36 años estás en tu mejor momento?
No lo niego, es mi mejor momento, porque el tema físico, por ejemplo, tomando mediciones, estoy mejor que hace 15 años en términos de porcentaje de masa muscular, y pasa lo mismo con el rendimiento de resistencia en la trotadora y en la bicicleta. Y también en la moto, en la cual he hecho muchas horas de entrenamiento, y me siento muy cómodo en ella. Ahora todo ello toca traspasarlo y ponerlo en uso en el Dakar de comienzo a fin.
¿Nunca te descuidás en la parte física?
Tengo un día de descanso a la semana (se ríe), que es el domingo, en el que generalmente no hago nada y también como cualquier cosa. Creo que ello es una forma sana de mantener un estilo de vida, y no solo hacer dieta por un periodo estipulado de tiempo. Es la única manera para que las cosas perduren.
¿Hablás bastante de la preparación física, se debe a que este Dakar se prevé será el más duro de los últimos años?
Uno por eso, pero antes de saber el recorrido y la dificultad que íbamos a tener, decidimos seguir mejorando para superar lo hecho en anteriores años.
¿En qué lugar de la clasificación general de motos te imaginás ingresando a Bolivia en la sexta etapa?
Sería hermoso ingresar a Bolivia ubicado entre los primeros diez de la general, habiendo estado en algunas etapas en el podio o cerca de los primeros cinco.
¿Una de tus metas también es ganar etapas?
Voy a salir a buscar ganar etapas y en la competencia veré cómo se dan las cosas para arriesgar un poquito más, pues no vamos a dejar pasar las chances que tengamos de imponernos en alguna jornada.
¿Las dunas son el mejor terreno para vos?
Es el terreno en el que me siento más cómodo y es la esencia del Dakar, pues es un terreno donde no hay caminos, hay que navegar, estar muy atentos y no solamente ir a fondo, pues hay que ir gestionando muchas cosas a su vez, en la cabeza, en el manejo, y escogiendo por dónde subir y bajar las dunas.
¿Qué sueños te quedan por cumplir?
Ganar etapas, y vamos a luchar hasta lo último para lograrlo.
También puedes leer: Problemas mecánicos frenaron a ‘Chavo’
¿Para cuántos años más hay Chavo en el Dakar?
No se una cantidad de años, pues voy a continuar corriendo varios Dakar más, en 2019 buscaré correr en cuatro ruedas. La decisión ya está tomada (cuadri o coches). Este será mi último Dakar en motociclismo.
¿A qué se debe el cambio?
Pasa que el nivel dentro de las motos es el más competitivo, difícil y peligroso del Dakar. Cada año vienen jóvenes de 18 o 21 años, pilotos oficiales de las marcas. Entonces hay diferencias con una persona del doble de la edad. Pero dentro de todo, el tema principal mío es el tiempo que tengo que dedicarle a mi otra actividad, porque yo no vivo del Dakar ni de las carreras, y ahí es cuando entro en desventaja contra los otros chicos que se levantan solo a entrenar.
Durante todo el año trato de hacer todo lo que hacen los pilotos de punta, pero además tengo otras actividades.
¿Cómo te imaginás al final tu último Dakar en motos?
Celebrando en Córdoba, comiento un buen churrasco y con mucha alegría de haber representado a Bolivia, mejorando lo hecho en mi anterior Dakar y de haber llevado alegrías al país.
¿Qué le decís a esa gente que te quiere y que te apoya en la ruta?
Gracias por estar en la ruta, sé que no es nada fácil ser espectador en el Dakar, pues también es un gran sacrificio, tienen que soportar el calor, la lluvia y tienen que viajar largas distancias. Realmente es muy emocionante y lindo ver las banderas bolivianas flamear cuando se está en competencia. Eso es como echar gasolina a un fuego, que nos da mucha energía y motivación.
¿Quiénes van a ser tus rivales en esta versión?
Chavo Salvatierra, Chavo Salvatierra y Chavo Salvatierra. Lo que pase en este Dakar depende de mí y corro la prueba principalmente para mejorar mis propios resultados. El Dakar es una carrera tan complicada, que no sirve de nada preocuparse por otros corredores.
¿Se duerme poco en el Dakar?
Sí, porque normalmente se duerme cinco horas por día, pero hay etapas en las que solo se descansa cuatro. Generalmente me meto a dormir a las 23:00 y hay que levantarse a las 4:00 de la mañana.
¿Qué es lo que te puede frenar?
Circunstancias fuera de mis manos que vayan surgiendo en la carrera, aunque creo que tengo bastante experiencia para lidiar con ellas.
¿Y qué te puede ayudar?
Que haya mucha navegación por caminos fuera de pista, porque ahí es donde voy mejor.
¿Cuál es tu mejor recuerdo del Dakar?
Fue terminar décimo en el Dakar 2017, eso hace un par de años por ahí se veía algo casi imposible, pero he demostrado que cuando uno realmente trabaja por sus sueños, se pueden lograr muchas cosas.
¿Y lo peor que recordás?
Las etapas que me ha tocado pasar frío con lluvia, donde he sufrido mucho por las temperaturas bajas.
¿Y nunca dijiste me bajo de la moto y lo dejo todo?
No porque soy de lucha y de darme por vencido difícil, pero sí paré para buscar una solución al problema, que era que me estaba congelando por el intenso frío. Entonces lo que hice fue buscar abrigo con bolsas de basura, papel y lo que sea para calentarme
Fuente: diez.bo