Desde Macedonia

Oso Mier/ HumoristaEnviado especial

A pocos minutos de volver del estadio, la delegación boliviana de fútbol, prepara maletas, para volver al país. La principal preocupación es que se espera que la aduana del aeropuerto, no haga problema porque lleva un equipaje de ceros, que ya parece contrabando. De todas maneras es un balance alentador porque gracias a estos sultánicos viajes, ya supimos que Irak se llamaba Macedonia y que macedonia es ahora una ensalada de frutas y sigue siendo una ensalada de problemas político religioso que da miedo.

Me llamó poderosamente la atención que más que túnicas árabes tradicionales, hubo gente que lucía muy moderna y a más de moderna, elegantemente vestida, a lo occidental. En los tronos de las autoridades de los dirigentes del fútbol, hubo una persona que estaba perfectamente vestida, lucía un hermoso anillo, una pulsera que brillaba y no dejaba el celular desde su lujoso trono de cuero de camello donde estaba sentado. Investigamos a ese personaje, porque podría ser un jeque o un sultán, pero para sorpresa nuestra, era el delegado de la Federación Boliviana de Fútbol! También hubo una barra boliviana viendo a su selección en Irak compuesta por 15 bolivianos, 6 mujeres, ocho hombres y un niño. Uno parecía espía, porque lucía como árabe, extremos que no pudimos comprobar.



La sensación que tengo, luego de ver los estadios y la organización que hay en estos Emiratos que nuestra realidad, es la otra cara de esta moneda de oro y arcilla.

Por ejemplo, el profesor Eduardo Villegas, entrenador de San José atribuyó al gran rendimiento santo, porque no cobraban salario desde hace tres meses. Esa es una objetiva prueba de que el fútbol debe ser nuevamente amateur (de aficionados) porque está visto que cuando los jugadores son profesionales, ganan bien, gastan bien, se van de farra, se involucran con damas cariñosas, duermen poco, entrenan poco y al ganar mucho dinero, dejan de ganar muchos partidos.

¡En el equipo santo! ¡Hace tres meses que no cobran! Es tal la desesperación que una fuente allegada a San José, dice que sus jugadores planearon una huelga de hambre para que les paguen sus sueldos, pero no lo harán, porque hace tiempo que no comen.Es tan bajo nuestro nivel futbolero que en el clásico cochabambino el mejor hombre fue Castellón de Aurora que metió el penal. No por haber convertido el tanto, sino porque bailó para festejar, con mucho ritmo y aire tropical. ¡Azúcar!حتى العودة (ya voy)