Exámenes de habilitación




Se ha incrementado la polémica sobre el tema de las lenguas nativas y los candidatos. Mientras que hay quienes dicen que el presidente Morales es trilingüe y el vicepresidente García Linera podría dar cátedra de aymara a cualquier vecino del Lago Titicaca, hay quienes dicen que «los gallos se ven en la cancha» y a los habladores es fácil reconocerlos, para que las cosas no queden como aquellos títulos universitarios que jamás aparecieron. Para la población sería muy divertido que la habilitación de los postulantes se resuelva en una suerte de concurso denominado «Saber para candidatear», en el que se le hagan preguntas sobre idiomas y otras ramas elementales como la aritmética. Para otros aspirantes a la presidencia tal vez sería mejor el juego de la Margarita, en el que los cruceños le pregunten «me quiere o no me quiere», puesto que ha vuelto a la palestra la sospecha el supuesto odio a los cambas en algunas personalidades. Para otros, habría que preparar un cuestionario para probar si en realidad son opositores o simplemente están disfrazados.

Fuente: eldia.com.bo