La economía boliviana fue reconocida como la más exitosa de Latinoamérica

Ovidio Roca 

El populismo cocalero y castrochavista, para financiar sus operaciones se integró al narcotráfico internacional garantizando en sus países el libre tráfico y excluyendo la presencia de instituciones imperialistas. Instituciones liberales y capitalistas que interfieren en la política de los países y pretenden controlar y combatir este ilícito y criminal negocio; también cínicamente promueven la democracia y la libertad de los ciudadanos, conspirando así con la necesidad de dominio e impunidad que necesita el castrochavismo para mantenerse indefinidamente en el poder.

Existe una fracción de la población boliviana, asociada al MAS, que quiere mantener su modo de vida basado en la coca, el narcotráfico y el contrabando, por lo que procura preservar el statu quo y defienden al Gran hermano, quien es el que garantiza este modelo de economía, concede garantías para el narcotráfico y facilita la vinculación con las redes internacionales.



Analistas internacionales hablan de la economía boliviana como la más exitosa de Latinoamérica, sin preguntarse antes  que la impulso y si es sostenible, si los bonos ofrecidos y las millonarias inversiones fueron exitosas o meros elefantes blancos.

Sabemos que el Populismo sin plata no funciona. Evo recibió una rica herencia de yacimientos de gas certificados, contratos firmados y gasoductos a los mercados, más precios excepcionales y además se endeudó hasta el jopo y para más yapa se gastó las reservas internacionales.

Lo tiró todo, lo robó, lo malgastó y cuando se acabó se fue y al partir a su periplo dejó un mensaje a los bolivianos: Ahí nos vidrios!; trabajen, hagan plata y me avisan cuando haya, para volver a gastar.

Evo en su exilio dorado, territorio del Peje Chavo, declaró ante la prensa internacional que en Bolivia sus opositores racistas lo discriminaban por su cara de indio. Esto me recuerda a su amigo camba, aquel que se hace el loco para peerse a gusto, ahora él se hace el indio para ídem.

El Chapare es un Estado independiente en el cual se aplica exclusivamente la ley de la coca nostra. El territorio de esta Satrapía aumenta continuamente en superficie e influencia; las Provincias como Ichilo de Santa Cruz y otras del Beni y Cochabamba han sido paulatinamente anexionadas y el Chapare sigue expandiéndose al ritmo de la coca.El territorio donde gobierna el Evo, es una Satrapía cocalera y ahora en su ausencia (pues viajó a conversar con el Cartel de Sinaloa y a comer tacos con el Peje) quedó al mando su representante Andrónico quien según las fuentes, siguiendo fielmente las instrucciones del Gran Hermano comanda las huestes cocalera y coordina con los carteles internacionales de narcotraficantes.

Como producto de todo esto se ha creado en el país una nueva cultura social para la cual: ser Dictador es un derecho humano y reelegirse indefinidamente contraviniendo la Constitución es también su derecho humano. Construir Palacios y Museos al Ego, adquirir lujosos aviones, helicópteros y autos blindados para el Gran Hermano, es su gustito y su derecho humano; bloquear las ciudades y dejarlas sin alimento es un derecho humano; lanzar dinamita en manifestaciones urbanas afectando a los ciudadanos, es un derecho humano; quemar bienes públicos, las casas de los vecinos, destruir puentes, asaltar supermercados, robarlos y quemarlos es un derecho humano y no existe ninguna ley que les exija el resarcimiento de los daños, pues no se puede contravenir un derecho humano.

Como corolario de esta aventura cocalera la situación económica que deja el masismo se presenta complicada, aunque ellos no lo entienden así o no les importa. Dijo Luis XV Rey de Francia: “Después de mí, el diluvio” y Evo I Rey del Chapare: “Fiarime caserito, con coquita te lo he de pagar”.

KAUSACHUN COCA. JALLALLA EVO Fuente: ovidioroca.wordpress.com