“Acabemos con este show, con esta injusticia, con esta farsa y atropello”. De esa manera se expresó el ministro de Gobierno Arturo Murillo en la sala del Palacio de Justicia de Santa Cruz, que por años fue el escenario de la tortura de cuarenta acusados del caso terrorismo, el proceso más emblemático del atropello que cometió el gobierno del cocalero prófugo. El funcionario retiró la demanda que se inició con la masacre del hotel Las Américas en abril de 2009, cometida por agentes de seguridad del régimen y ordenada por Evo Morales. Le falta dar el paso al Ministerio Público, el otro actor clave de este montaje usado para doblegar al movimiento autonomista surgido en Santa Cruz y traicionado por algunos supuestos impulsores. Justamente, ahora toca el turno de conocer la verdad, mostrar a los culpables, a los cómplices y las maniobras que usaron en más de diez años.
Fuente: eldia.com.bo