Evo se comunicó en 10 oportunidades con Fernando Humérez, uno de los encarcelados por caso respiradores

Contactos telefónicos de implicados con altos dirigentes del Movimiento al Socialismo.

Foto: El Diario

Evo se comunicó en 10 oportunidades con Fernando Humérez, uno de los encarcelados por caso respiradoresEl director nacional de la Felcc, Iván Rojas. Foto: ABI



Brújula Digital | La Paz

Fernando Humérez, conocido como el “testigo clave” en el caso de la compra de 170 respiradores supuestamente con sobreprecio, llamó en 19 oportunidades a Evo Morales, que renunció por fraude electoral y huyó del país, y recibió 10 llamadas del exmandatario, entre el 1 de enero y 19 de mayo del presente año, de acuerdo con un trabajo pericial hecho por la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) al aparato telefónico del ahora encarcelado en San Pedro.

“En el lapso de tiempo anterior al 4 de mayo de este año, el señor Humérez también llamó en 19 oportunidades al expresidente Evo Morales, y recibió 10 llamadas por parte del exmandatario”, sostuvo el director nacional de la Felcc, Iván Rojas, en conferencia de prensa junto al ministro de Gobierno, Arturo Murillo.

La fabricante española GPA Innova vendió respirador básico -modelo adquirido por el Ministerio de Salud- al Gobierno de Bolivia a través de intermediarios; tiene el precio de 6.000 euros (6.567 dólares) y que los accesorios suman dos mil euros más. Por lo cual el modelo básico cuesta en total 8.000 euros, equivalentes a 8.756 dólares. Pero el ministerio de Salud pagó 28.080 dólares.

Los equipos, que ya fueron distribuidos a distintas regiones del país, no funcionan porque su software no está actualizado y además carece de algunos elementos. Bolivia ya pagó cerca de 2,2 millones de dólares de un total de 4,7 millones y el Gobierno anunció que no pagará más a la empresa intermediaria contratada en España, IME Consulting.

En la presunta compra irregular de respiradores, además del exministro de Salud, Marcelo Navajas, el exdirector jurídico del Ministerio de Salud, Fernando Valenzuela; el exjefe de la Agencia de Infraestructura en Salud y Equipamiento Médico (Aisem), Geovanni Pacheco.

Las miles de llamadas

Rojas explicó que luego de realizar la pericia forense al celular de Humérez, se detectó que desde ese aparato telefónico se realizaron y recibieron 5.800 llamadas, entre el 1 de enero y el 19 de mayo de este año.

«El señor Humérez realiza 50 llamadas al señor Andrónico Rodríguez, vicepresidente de las seis federaciones del Trópico y el señor Andrónico Rodríguez le realiza tres llamadas a Humérez», informó Rojas.

El trabajo pericial detectó que Humérez también se comunicó este año, en reiteradas oportunidades, con el exministro de Gobierno, Carlos Romero; el vicepresidente del MAS en Cochabamba, Orlando Zurita; la gobernadora cochabambina, Esther Soria (MAS); el exalcalde de Colcapirhua, Mario Severich y el alcalde de Cliza, Walter Illanes.

Humérez también se habría contactado, mediante llamadas, con el exministro de Salud, Aníbal Cruz, el abogado de Gabriela Zapata, Walter Zuleta y el principal implicado en el denominado «caso respiradores», Fernando Valenzuela, conocido como «el hombre de confianza» de la exministra, Gabriela Montaño.

El director de la Felcc también informó que se hizo el mismo procedimiento con el celular de Fernando Valenzuela, en el que se encontró una carpeta oculta con una serie de conversaciones, vía Whatsapp, con una funcionaria del Ministerio de Salud y el cónsul de Bolivia en Barcelona, David Alberto Parejas.

Rojas relató que el 8 de marzo, dos meses antes del escándalo, se registró una conversación entre Valenzuela y Carlos Rodrigo Montaño Viaña, hermano de la exministra, Gabriela Montaño.

En ese chat, Carlos Montaño le dice a Valenzuela: «tenemos un huevo de cosas que hablar, pero al menos de dos», más tarde insiste y le precisa que uno «es un tema personal».

En esa charla, Valenzuela le dice: «Hermano, estoy jodido, han intervenido mi teléfono, tienen sospechas jodidas» y advierte que el Gobierno está muy cerca de descubrir que «aún sigo en contacto».

Luego, Valenzuela y Gabriela Montaño intercambiaron llamadas perdidas de ida y vuelta por Whatsapp, lo que hace presumir que eran una suerte de códigos secretos para trasladar la comunicación a una plataforma difícil de rastrear, como el Telegram.

También por Whatsapp, Valenzuela habló con el entonces director de la Aisem, Geovani Pacheco; el ex ministro de Salud, Marcelo Navajas; y Luis Fernando Humérez, conocido como el «testigo clave».

En ese contexto, el ministro de Gobierno, Arturo Murillo, afirmó que los resultados del estudio pericial evidencian que el denominado caso de corrupción por la compra irregular de respiradores españoles, es más bien una conspiración contra el gobierno de la presidente Jeanine Áñez, digitado por el MAS.

«Saquen ustedes sus propias conclusiones. Nosotros trabajaremos para que exista transparencia en nuestro pueblo. Más que corrupción, es una conspiración», aseveró.

Fuente: Brújula Digital