Ministro Arias llama a la reconciliación dejando de convertir la venganza en reivindicación

 

 

La Paz, 25 ago (ABI). – El ministro de Obras Públicas, Iván Arias, convocó al país a la reconciliación dejando de lado los deseos de venganza que fueron convertidos en reivindicación porque considera que solo las sociedades que consiguen perdonarse pueden avanzar en el desarrollo.

«Reconciliémonos, démonos la mano y construyamos un país entre todos, para todos hay cabida acá, este país es demasiado grande como para decir que no hay espacio», dijo Arias.



La autoridad gubernamental, en una entrevista con Cadena A, aseguró que distintos sectores tienen demasiado odio acumulado y en consecuencia también muchos deseos de venganza.

«Hemos vuelto la muerte en una bandera, cuando hay más muertos pareciera que fuera mejor, hemos vuelto la venganza en una reivindicación, (hemos convertido) el odio como una forma de buscar solución a los problemas, pero yo veo Japón que recibió dos bombas atómicas, veo Europa que enfrentó dos guerras mundiales y miren dónde están, porque se perdonaron, las sociedades tienen que personarse», enfatizó.

Indicó que el perdón es la única forma de salir adelante porque el tener tanto odio, rencor y frustración acumulados no lleva a ningún resultado positivo.

Entonces «rompamos ese círculo vicioso, si no rompemos, dentro de poco vamos a volver (a los conflictos sociales), tenemos que romper este círculo de odio, venganza y muerte», insistió.

Asimismo, remarcó la importancia de mirar hacia adelante dentro del mundo actual.   «No podemos seguir buscando el odio (hablando de) los tiempos incaicos (o indicando) que yo no soy boliviano, señores estamos en pleno siglo 21, tenemos que insertarnos al mundo», manifestó.

Sin embargo, aclaró que el perdón no debe significar impunidad, «como lo que quieren hacer en el parlamento, si has cometido un delito, tienes que pagar, si cometiste un acto de lesa humanidad, tienes que pagar».

En las últimas semanas, Bolivia, en plena pandemia del coronavirus, registró un bloqueo de carreteras durante 12 días y la extrema medida de presión no dejó pasar ni oxígeno medicinal a los hospitales, donde, de acuerdo a información del Gobierno, más de 40 personas perdieron la vida por falta de ese elemento.