Un populoso cabildo en la plaza central destituye al alcalde Flavio Flores y lo declara persona ‘non grata’
Mediante un cabildo popular, Samaipata acuerda destituir al alcalde municipal, Flavio Flores, por «mandato del cabildo» y lo declara «persona no grata». Además, mantendrá la vigilia pacífica en las afueras de las instalaciones municipales en espera que el Concejo elija a una nueva autoridad.
A nombre del Movimiento Ciudadano Samaipateño, el presidente del Cómite Cívico, Roddy Paniagua, consultó a los participantes si estaban de acuerdo en «destituir al alcalde por mandato de este cabildo». La pregunta estaba en el aire desde que se convocó el cabildo, pero con la respuesta unánime de la multitud, se ratificó el deseo de los vecinos.
Instantes después, el notario de fé pública, Erick Prado, suscribió la decisión popular aprobada en el Cabildo en un acta formal.
Pedro Herrera, responsable del Movimiento Ciudadano, destaca la aprobación de tres artículos que componen la resolución: la destitución de Flavio Flores como alcalde de Samaipata; instruir al Concejo para que proceda, según reglamento, a la elección del nuevo alcalde interino; y mantener la vigilia y toma pacífica hasta la elección de la nueva autoridad.
La tensión en el municipio se arrastra desde mediados de agosto tras los conflictos suscitados entre pobladores y movilizados. La tarde noche del 7 de agosto, un grupo de bloqueadores, amparados por el pedido de la COB, irrumpía en el centro urbano de Samaipata y atemorizaba a la población.
A raíz de esos sucesos, se reclamó la pasividad por parte del alcalde del MAS, Flavio Flores, que permitió el actuar de los movilizados. Entre las denuncias que circulaban se apuntaba al supuesto apoyo que había ofrecido a los bloqueadores.
Flores desmintió en reiteradas ocasiones esta acusación y expresó que él mismo, en persona, coordinó con la Policía para la restitución del orden.
Desde ese momento, el cruce de acusaciones entre uno y otro bando fue subiendo de todo. La ausencia del alcalde a las dos citaciones cursadas por el Concejo Municipal que solicitaba un informe oral sobre su participación en los sucesos fue el detonante para que el pueblo samaipateño exija la renuncia de Flores.
El Secretario Municipal Administrativo, Norberto Borda, explicó a EL DEBER que la ausencia del alcalde a la primera de las audiencias públicas se debió a la imposibilidad de suspender las reuniones que ya tenía pactadas en Santa Cruz. Agregó que Flores envió una carta escrita en la cual respondía al cuestionamiento del Concejo.
Sin embargo, Borda remarca que la falta de garantías y resguardo hacia la persona del alcalde y sus familiares fue el motivo de su ausencia en la segunda ocasión en la que fue citado.
Para entonces, los pobladores habían cercado el edificio edil en una vigilia pacífica que exigía la destitución del alcalde.
Borda señala que «hay grupos violentos organizados que pretenden forzar, a toda costa, la renuncia de Flores». EL DEBER ha tratado de comunicarse con el alcalde, pero fuentes cercanas a él afirman que se encuentra resguardado por temor a sufrir agresiones y presiones.
Con la resolución asumida en el cabildo, la tensión continua en el municipio en espera de la sesión del Concejo municipal y las decisiones que pueda asumir.