Fuente: La Razón

“Un país un poco más en ruinas”. Así resumió el exministro y parte de la comisión de transición Wilfredo Chávez la situación económica de Bolivia tras recibir gran parte de los informes de las autoridades del gobierno saliente de Jeanine Áñez.



“El tema económico, este gobierno decía que nos está dejando 17 mil millones de bonanza, se ha encargado de dejarnos deuda flotante, deuda interna, de dejarnos un país un poco más en ruinas que desdice absolutamente lo que nos dicen sus personeros”, aseguró.

No dio mayores detalles, pero reveló otros datos como la pérdida de documentación de la compra de los respiradores con sobreprecio en el Ministerio de Salud. “Si a alguien le quedaba una pequeña duda de que tenía transparencia este gobierno, con este hecho se termina cualquier elemento, son unos delincuentes”.

También denunció que, a poco de terminar su gestión, se pagó desde el Viceministerio de Vivienda, dependiente del Ministerio de Obras Públicas, Bs 240 millones a la empresa Rosendo Barbery por la construcción de viviendas.

“Equivalente a 37 millones de dólares, eso está haciendo este gobierno de pititas, de ladrones, a tiempo de irse del Estado. Hoy se han dado un aguinaldo de 240 millones de bolivianos, es gente que ha robado”, aseguró.

Otro aspecto observado es el saneamiento y titulación de tierras en favor de la familia del ministro de Economía, Branko Marinkovic, aunque advirtió que un aspecto delicado es el que no dejaron recursos para la subvención de diésel.

“La información que tenemos, a objeto de poner zancadillas al gobierno entrante, no ha cumplido con la responsabilidad de prever los recursos económicos para subvención del diésel”, aseguró, sin contar, dijo, “haber provocado un daño terrible con la firma de un contrato (de gas) con Brasil”.

“Lo que quieren es que no haya diésel y crear zozobra en la población y en el sector agricultor, quieren dejarnos un bomba de tiempo”, advirtió y dijo que otro rubro afectado en el subsidio de lactancia y prenatal, pues a poco de terminar su gestión lanzaron licitaciones.

“Graves temas de ineficiencia administrativa, de tragedia administrativa”, resumió Chávez y lamentó que los informes se los haya dado personal subalterno y no las propias autoridades.

Resta recibir reportes de algunas instituciones del Estado para tener un panorama completo de cómo se dejó a Bolivia, dijo.