Empresarios se declaran en estado de indefensión frente al auge del contrabando

A pesar de estar cerrada la frontera, la mercadería ingresa por vías ilegales debido a que tienen un menor costo económico en localidades fronterizas del país vecino, ya que en Yacuiba, Bermejo y Villazón rige el dólar “blue” que significa 100 pesos argentinos equivalen a Bs 4 en la actualidad.

Fuente: El Deber

El empresariado de Tarija se encuentra en estado de indefensión del contrabando masivo de productos alimenticios y bebidas alcohólicas que se internan por los pasos fronterizos con Argentina.

A pesar de estar cerrada la frontera, la mercadería ingresa por vías ilegales debido a que tienen un menor costo económico en localidades fronterizas del país vecino, ya que en Yacuiba, Bermejo y Villazón rige el dólar “blue” que significa 100 pesos argentinos equivalen a Bs 4 en la actualidad.



El presidente de la Federación de Empresarios Privados de Tarija (FEPT), Marcelo Romero, lamentó que estén en situación de indefensión debido a la dejadez de las autoridades nacionales, departamentales y municipales que no se preocupan por una lucha frontal contra el contrabando.

Romero pidió un control real y efectivo en los pasos fronterizos para evitar el ingreso masivo de productos alimenticios y bebidas alcohólicas que se comercializan a bajos precios en los mercados de abasto.

“Emplazo a las autoridades a ponerse al frente y luchar contra el contrabando”, desafió el empresario.

El gerente general de la Asociación Nacional de Industrias Vitivinícolas (ANIV), Ricardo Ortuño, exhortó a que ahora les apoyen con hechos y no les dejen en indefensión.

Según Ortuño, las ventas de vinos y singanis de las bodegas se redujeron en más de un 60% en los últimos seis meses, al punto que la producción del 2019 y 2020 se encuentran estocadas en sus almacenes.

“No se venden por la competencia desleal de las bebidas alcohólicas que ingresan de contrabando, que tienen un menor costo a los precios de las empresas vitivinícolas”, expresó.

En la vendimia 2021, se prevé que el sector deje de comprar un 60% de uva a los productores vitivinícolas si no repuntan las ventas en los siguientes meses.

La ilícita actividad no solo afecta al sector vitivinícola, sino también a las pequeñas y medianas empresas de lácteos, cárnicos y producción de cervezas.

El estudio socioeconómico de la cadena de uvas, vinos y singanis menciona que anualmente se internan bebidas alcohólicas por un valor estimado de $us 66 millones y el 29% ingresa desde Argentina.