La Fcbcb cumple 25 años con aciertos y dudas por su futuro

La institución administra actualmente ocho repositorios y centros culturales en todo el país y es posible que el Gobierno entrante realice cambios.

Página Siete  / La Paz



En un año en el que el sector artístico cultural se ha visto forzado a cerrar sus puertas por la pandemia de la Covid-19 y poco después de unas elecciones generales que pueden traer algunos cambios en la gestión, la Fundación Cultural del Banco Central de Bolivia (Fcbcb) cumple 25 años.

Un cuarto de siglo, con luces y sombras, en los que ha adquirido la tuición de ocho repositorios y centros culturales en diferentes puntos del país, y en los que ha  reafirmado su compromiso por “mantener, proteger, conservar, promocionar y administrar los repositorios nacionales y centros culturales bajo su tuición”, según destaca la propia institución en su página web.

“Me acuerdo que todos dijimos: ‘Qué bien que haya una entidad que se ocupe y además destine dinero —que es lo que más suele faltar a las empresas culturales— a este tema”, recordó Mabel Franco, que 25 años atrás trabajaba en el periódico ‘Presencia’. “Empezó discretamente, pero yo creo que con varios pasos certeros”, agregó.

Creada el 31 de octubre de 1995 mediante decreto, la institución entró en funcionamiento dos años después. Entonces administraba cuatro repositorios: la Casa de la Libertad, el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia (ABNB), ambos en Sucre; la Casa Nacional de Moneda, en Potosí; y el Museo Nacional de Etnografía y Folklore (Musef), en La Paz. En 2002, la fundación recibió también la tuición del Museo Nacional de Arte en La Paz y siete años después se inauguró bajo su gestión el Centro de la Cultura Plurinacional (CCP), en Santa Cruz.

“Los museos y centros culturales dependientes son modelos  de gestión cultural y esto no sólo se debe a sus objetivos trazados sino a los recursos económicos que reciben del Estado y a la consecución permanente de sus proyectos y tareas”, señaló Norma Campos, gestora cultural.  “Se diseñaron modelos de gestión cultural acertados para los más importantes repositorios del país. Un gran avance en la institucionalidad cultural”, añadió.

En los siguientes años se creó el Museo Fernando Montes y el Centro de la Revolución Cultural. Y en 2020, se firmó el contrato que otorga en comodato el Centro Cultural La Sombrerería en favor de la fundación, aunque el traspaso aún no se hizo efectivo.

Entre los presidentes que han dirigido   la institución a través de este cuarto de siglo se encuentran Valentín Abecia, Carlos Calvo, Fernando Illanes de la Riva, Roberto Borda, Homero Carvalho, Cergio Prudencio, Ximena Medinacelli (presidenta interina) y Guillermo Mariaca, quien ocupa el cargo en la actualidad.

“El balance de estos 25 años es ampliamente positivo, de valioso aporte a la construcción de rutas de conciencia cultural, de fortalecimiento de identidades culturales, de espacios de promoción y difusión, así como a la protección y difusión del patrimonio cultural, encaminados al desarrollo  de la cultura en nuestro país”, aseguró Campos.

Lo propio opinó Germán Araúz, que en 1995 era editor en el diario ‘La Razón’. “Creo que es una institución cultural que nuestra sociedad requiere. Es muy necesaria”, sostuvo el periodista, después de calificar el trabajo de la institución en estos 25 años de “buena”.

Además de los aciertos, sin embargo, la fundación dejó en este tiempo algunas deudas con el sector, entre las que Franco destacó la descolonización y la creación de un museo para el arte contemporáneo. A esto se sumaron las acusaciones de irregularidades en algunos de los repositorios.

“Lamentablemente en el último tiempo he leído mucho de denuncias de la gestión anterior. Habrá que ver cuánto hay de cierto en todas las denuncias que, creo yo,  han empañado  la imagen de la fundación”, dijo la periodista.

Retos futuros

En el futuro próximo, la fundación se enfrenta a diversos retos. Entre ellos, el presidente del Consejo, Guillermo Mariaca, identificó tres: “Convertirse en una institución de Estado que no esté sujeta a los avatares políticos; hacer del patrimonio y la cultura viva un bien de primera necesidad; y que la visión de una democracia integral que asuma los desafíos para superar la desigualdad y potencie las oportunidades de la diversidad se realice a partir de la centralidad de la cultura”, explicó la autoridad, a través de un comunicado.

Los cambios políticos también son destacados por Franco, quien insistió en la importancia de dar continuidad a las autoridades y evitar que la fundación sea utilizada como un “botín político”.

“Lo ideal sería que la fundación no se viera afectada por los cambios políticos. Que se mantenga su relativa autonomía para que pueda desarrollar efectivamente los planes que se ha trazado”, recalcó la comunicadora. “Habrá que perfeccionar, habrá que ser más transparente, pero eso no quita el valor que tiene una entidad como es la fundación”, concluyó la periodista.

Campos, por su parte, señaló la posibilidad de que   la institución genere fondos concursables para proyectos artistico-culturales y la importancia de que las autoridades tomen conciencia sobre el rol de las culturas.

“Lamentablemente, a partir del cierre del Ministerio de Culturas hemos visto la fragilidad del área cultural. Ha evidenciado el desinterés y poco entendimiento de las autoridades de turno que no vieron en la cultura el factor que coadyuva al desarrollo humano y económico. Vieron quizás la parte superficial de la cultura, no lo profundo y transformador, y desde esa óptica es importante la toma de conciencia de las nuevas autoridades sobre este rol de la cultura que permita potenciar a la Fcbcb y lograr posicionarla a nivel nacional con la creación de espacios acordes a las realidades locales en las ciudades donde aún no tiene presencia”, subrayó.

El Consejo de Administración de la Fcbcb está compuesto por siete consejeros: cuatro son designados por el ente emisor y tres por el Gobierno de turno. En los últimos años fue el Ministerio de Culturas y Turismo el que apuntaba a los tres nuevos miembros, pero aún queda por ver si el presidente electo Luis Arce restituirá dicha cartera de Estado, después de su desmembramiento el pasado junio.

Fuente: paginasiete.bo