Las amenazas de muerte a Mike Dean, un ejemplo más de la radicalización en el fútbol

Mike Dean, con la roja en la mano tras expulsar a Tomas Soucek, del West Ham
Mike Dean, con la roja en la mano tras expulsar a Tomas Soucek, del West Ham | AFP

“Como árbitro, el abuso se convierte en rutina”, así empieza Mark Clattenburg un artículo de opinión de este martes en el Daily Mail. El excolegiado inglés, ahora encargado de los árbitros de Grecia, ha querido alzar la voz ante los recientes hechos ocurridos en la Premier League, con las amenazas de muerte a Mike Dean, colegiado del West Ham-Fulham.

Dean, tras una revisión del VAR, expulsó este domingo a Tomas Soucek, del West Ham, por una acción considerada como agresión sobre Aleksandar Mitrovic muy discutida, tanto en las declaraciones post partido, como en las redes o los medios en la jornada posterior. Unos días antes, Dean había decidido también expulsar al defensa del Southampton Jan Bednarek, ante el Manchester United, justo antes de que su equipo recibiera un vendaval de nueve tantos en contra.

Todo este ruido provocó que el árbitro, este lunes, tuviera que dirigirse hacia la comisaría de policía de su ciudad para denunciar que él y su familia habían recibido amenazas de todo tipo, y también mensajes abusivos, según reportó la Asociación de Árbitros Profesionales de Inglaterra (PGMOL).



Por este motivo, el árbitro decidió asimismo pedir a la Premier League que no le designaran ningún partido para este fin de semana, ya que se sentía intimidado y atacado. Es “totalmente inaceptable”, decía Mike Riley, responsable arbitral en Inglaterra.

La liga entendió que la roja a Soucek fue un error, y la anuló ante la reclamación del West Ham. Aun así, la afición no ha perdonado a Dean, ni a su familia, que es la “línea roja” que ha provocado la reacción del mítico colegiado.

El propio Soucek quiso referirse al asunto en redes sociales, defendiendo al árbitro: “Sean cuales sean las decisiones tomadas sobre el campo se tienen que quedar sobre el campo. No me gusta oír que esto pueda interferir en la vida personal de nadie y mando a Mike Dean y a su familia todo mi apoyo. No hay lugar al abuso, de ningún tipo. Lo que pasó lo dejo en el pasado y ya me centro en lo que queda de temporada”.

En esta línea, el relato de Clattenburg sigue siendo aterrador.

“Solía recibir cartas en mi casa. Iban dirigidas a ‘Mark Clattenburg, Gosforth’ y mi cartero, pensando que me estaba haciendo un favor, las entregaba. Algunos de los insultos eran viles y, sí, había amenazas. Lo denuncié a la policía, pero, dado el anonimato, nadie fue detenido ni condenado«, continúa Clattenburg en su carta. «Es hiriente. Da miedo. Lo peor de todo es que es lo que las empresas de redes sociales están permitiendo que ocurra».

Clattenburg denuncia también que los hechos se amplifican en la actualidad con las redes. “Hay un límite. Por desgracia, con las redes sociales, esa línea se cruza con demasiada frecuencia”.

Pero no es un caso aislado. “Michael Oliver tuvo que sacar a su familia de su casa después del partido en el que la Juventus fue eliminada de la Liga de Campeones por el Real Madrid en 2018”, comenta Clattenburg, refiriéndose al penalti que Oliver sancionó sobre Lucas Vázquez y eliminó a la Juve de la Champions.