Los mestizos, y el Oriente, ¿dónde entramos en esto?

Carlos Valverde B. (@CFValverde) | Twitter

Carlos Federico Valverde Bravo

Cuando se debatía la Asamblea Constituyente, con el resultado que conocemos, se debatió la idea (pensada por largo tiempo, además) de imponer en el país el nombre de Estado Plurinacional del Tahuantinsuyo. Como antecedente e historia, recordemos lo siguiente: Tahuantinsuyo: Sede: Cuzco (Perú). Año 1200 dc. Tahuantinsuyo: 2 significados (quechua): Tahua: que significa 4 -Suyo: que significa región. La cosa fue que, con el afán de imponer un nombre en un espacio extraño al que es Bolivia, se socializó la idea que corría y gustaba entre los asambleistas indianistas sobre todo aimaristas, que no tenían nada que ver con el imperio quechua.



Ahí es donde entra Hugo Chávez Frías (si, el mismísimo dictador venezolano) que la frenó en seco; imagínense, Chávez, “indoamericano, mestizo, mulato y adorador de Bolívar , financiador del masismo y de Morales no iba a permitir que le quiten “ a la hija prediecta del Libertador” el nombre que de él derivaba, de manera que Chávez habló con Morales, con los españoles a los que financiaba y que participaban en la organización del nuevo Estado boliviano y la idea quedó ahí; se frenó el nombre; las intenciones indianistas se postergaron, pero, no serían archivadas.

En ese momento había ganado la idea de García Linera/Morales/Grupo Comuna; el indigenismo marxista de García Linera, se encuentra en la práctica, donde se lo busque :marxismo-leninismo-stalinismo; jacobinismo francés, revolución francesa, democracia sindical, el poder en la calle y la violencia como método. El modelo de García Linera y de los que lo colaboraron se expresó en el establecimiento de ese Estado de violencia oficial, de control político y duras medidas (Cochabamba, enero 2007, C Urresti, Chaparina, Porvenir, Hotel Las Américas). Se había impuesto una línea, la otra simplemente fue postergada. Choquehuanca que fue nombrado Canciller, no perdió ese pleito, esperó su momento.

En Octubre del 2020 se lo elige vicepresidente y vuelve a la carga con varias señales de retoma de la idea original. En su discurso de posesión, simbología andina, aimara, tremendamente confrontador y, además, de espaldas a las tierras bajas; el Estado del que ha venido hablando Choquehuanca no sólo que no nos reconoce a los habitantes de tierras bajas como parte del mismo, sino que probablemente “su idea” del Estado ni siquiera nos contenga a los que aquí vivimos y nacimos; le interesan las tierras fértiles y productivas, pero nosotros (como personas) no entramos en la idea, como no deben entrar los mestizos blanciodes de La Paz, Oruro, Potosí, Cochabamba (quechuas)…Chuquisaca – ni se diga Tarija – (los mestizos de las clases populares son parte de la idea siempre y cuando se sometan).

No se escribe esto por escribir o no se lo debate porque si; se lo debate porque las señales son claras: imponernos primero por constitución la trilogía “ama sua, ama llulla ama kella (ya le yaparon el ama llunku) que está demostrado que fue un invento español cuando dominaban lo que fue el imperio incaico (peruano, por tanto), imponernos la wipala que es una bandera del Tahuantinsuyo, que baja desde del sur de Colombia-Ecuador hasta Chile-Argentina, como un “símbolo nacional” sin asiento base y ahora, la Chacana, como “marca país”, que es peruana también. “Fue el cronista collagua Juan de Santa Cruz Pachacuti Yamqui Salcamaygua, quien en 1613 al escribir su «Crónica de Relación de Antigüedades de este Reino del Pirú» dibujó e insertó en ella, un grabado sobre la cosmovisión andina, que se encontraba en el Altar Mayor del Templo del Coricancha en Cuzco, el cual denominó Chakana, el puente o escalera que permitía al hombre andino mantener latente su unión al cosmos. (https://pueblosoriginarios.com/sur/andina/inca/chakana.html)

A ver, símbolos ajenos, “no republicanos”, Bolivia nace de la lucha de 15 años de los mestizos que se rebelaron contra “sus mayores; contra el imperio”, no tiene nada que ver con esa síntesis de la cosmovisión andina y otros “adornos de ese tipo… que pueden ser respetables culturalmente hablando, pero es extraña al “ser nacional” y da para preguntarse: y nosotros, los de las tierras bajas del territorio boliviano; mestizos cambas, los indígenas de las naciones indígenas de las tierras bajas, dónde entramos en ese entramado que niega lo mestizo (reitero, también los mestizos collas (usando u. genérico para definir a los que no son de tierras bajas, sin ningun contenido peyorativo) que no toma en cuenta a las naciones pre-existentes y que son culturas vivas, vigentes hoy, en la Bolivia del Siglo XXI.

La Chacana no es de Bolivia, es peruana: el cronista collagua Juan de Santa Cruz Pachacuti Yamqui Salcamaygua, quien en 1613 al escribir su «Crónica de Relación de Antigüedades de este Reino del Pirú» dibujó e insertó en ella, un grabado sobre la cosmovisión andina, que se encontraba en el Altar Mayor del Templo del Coricancha en Cuzco, el cual denominó Chakana, el puente o escalera que permitía al hombre andino mantener latente su unión al cosmos.

Te queda claro? No es un tema menor, tiene mucho significado todo esto… es la imposición cultural, es la negación del otro… y van a pasaos agigantados, ya están desarmando las representaciones bolivianas en el exterior, dejando de lado a los que estudiaron en la Academia Diplomática, dejaron atrás el Servicio Exterior, reconocido en una Ley , lo cambian por resolución para llenarlo con “jóvenes” a los que formaron en esta “ideología” de Choquehuanca y sus operadores.