La estrella de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, derrumba a Pablo Iglesias

 

El Partido Popular (PP) en las elecciones de la comunidad autonómica de Madrid de 4 de mayo de 2021, demostró con su candidata Isabel Díaz Ayuso que hay estrellas en el firmamento que se irradian en las urnas para enamorar al electorado madrileño, al punto de alcanzar contra toda previsión de encuestas publicitaria el triunfo en las elecciones que, si bien no fueron crispadas, pero se desarrollaron en un escenario político muy polarizado.



El fenómeno Ayuso como califica la prensa madrileña con el PP de Pablo Casado  ha logrado 65 escaños de los 136 que tiene la asamblea, que representa el 44,73% con 1.620.213 votos; el Mas Madrid con Mónica García 24 escaños, 16,97% y 614.660 votos; el POSE del actual gobierno de Pedro Sánchez alcanzó 24 escaños, 16,85 %, representa 610.190 votos; VOX con 13 escaños, 9,13%, 330.660 votos y en quinto lugar (último) se ubica Unidad Podemos con el Secretario General del partido de Pablo Iglesias que decidió renunciar a la tercera vicepresidencia de España (15-03-2021) para dar competencia a Ayuso, logrando 10 escaños, que representa el 7,21% y 261.010 votos.

La musa como también se la bautiza a la “estrella de Madrid”, ya en campaña dijo: “que va a arrasar y logró”. Los resultados son elocuentes porque a poco cuatro escaños no alcanzó la mayoría absoluta, pero  para la investidura no precisa de los votos de la extrema derecha (VOX) ni los sumados de Mas Madrid, Partido Socialista (PSOE) y Unidad Podemos al no superar los 1.620.213 votos que captó en la Comunidad madrileña, que marca un mensaje para el gobierno de Pedro Sánchez en su política duramente cuestionada en temas de sanidad, educación y parados.

Se considera en la democracia española, que en Madrid hubo la detonación de dos bombas ante el fenómeno Ayuso: primero, el fracaso electoral de Pablo Iglesias y el anuncio de su retirada política al no tener resonancia la frase: “Que el voto electoral decida” y la segunda, que el partido de Ciudadanos abrió las puertas a la desaparición al estar al borde del naufragio y haber perdido la oportunidad de estructurar un partido con mejor alcance nacional, cuando tuvo la ocasión de hacerlo y la desperdicio con Pedro Rivera.

Si algo habrá que interpretar de los resultados, es que estos constituyen un derrumbe para la izquierda comunista de Podemos en diez años de liderazgo oscuro de Pablo Iglesias, vinculado con la consultora Neurona en desplazamientos de fondos económicos por el orden 1,6 millones de dólares desde Bolivia durante el gobierno del expresidente Evo Morales por más de ocho contratos de publicidad en campañas electorales que les fueron adjudicados y que las demandas han sido archivadas inexplicablemente, pero que obviamente podrían reabrirse ante la presión del Parlamento Europeo que aprobó la Resolución P-9-TA (2021) 0156 de 29 de abril de 2021, en la que condena también la detención ilegal de la expresidente Jeanine Añez, dos de sus ministros y se demanda la urgencia de un cambio en la justicia que funcione en forma independiente de los otros órganos del Estado.

Del descalabro no se salva el partido socialista (PSOE), que debe cargar con el castigo de los votantes que lo ubican en el tercer lugar en los resultados, que le permite a Mónica García candidata de “Más Madrid” consolidarse como la primera fuerza opositora con 24 escaños y 614.660 votos; es decir, con 4.470 votos de diferencia que le permite ver por encima de los hombros del PSOE, reivindicando su protagonismo de “fuerza dinámica progresista”, atribuida en gran medida a su ideólogo Iñigo Errejón.

El líder de Podemos Pablo Iglesias duramente denostado por la comunidad española como el personaje más oscuro y peligroso de la política ligado con grupos Etarras al cierre de las urnas ha manifestado: “Dejo todos los cargos. Dejo la política entendida como política de partido e institucional; sigo comprometido con mi país, pero no voy a ser un tapón para la renovación de liderazgos que se tiene que producir en nuestra fuerza política.

Enfatizó que, ante el fracaso político, se ha convertido en el “chivo expiatorio” que moviliza los efectos más oscuros y contrarios a la democracia y ha decidido dar un paso atrás, consciente de que no contribuye a “sumar” para que el proyecto de Unidas Podemos pueda “consolidar su peso institucional”.

Finalmente, reconoció: “Hemos fracasado” para referirse a los resultados de la izquierda en estas elecciones del 4 de mayo y calificó el éxito electoral impresionante de la derecha de trumpista que representa Ayuso, es una tragedia para la sanidad, educación y los servicios públicos y que la deslealtad institucional de la Comunidad de Madrid hacia el gobierno y otras instituciones se va a intensificar”.

Las renovaciones en políticas son saludables al menos si parten de un escrutinio como clamor de las bases, en el caso de Pablo Iglesias y su derrumbe en la política luego de diez años, constituye una premonición para su aliado y benefactor Evo Morales Ayma al caminar sobre la cornisa de un edificio de cien pisos con cimiento de arena, entonces ¿Quién será el próximo en retirada política? supuestamente el indeseable.

Termino con esta frase: “Los que quieren quedarse en el poder no es porque aman a su pueblo, sino para agigantar sus figuras con sobrada demagogia”.

Pedro Gareca Perales, Abogado constitucionalista y defensor de DDHH.