Ruidos de la arena internacional que llegan a Bolivia

Por Fico Villa, desde Buenos Aires, Argentina

A lo largo de su historia, se puede decir que Bolivia tuvo poca relación de conflicto con entes internacionales y menos con países europeos.



 El reciente procesamiento y detención de la ex-presidente Añez pone un antecedente Geo-político en las relaciones exteriores del país. Cosa poco usual si se tiene en cuenta que en general Bolivia ha contado hasta hoy con buenas relaciones con los grandes bloques del mundo debido a su pacifismo y de ser visto como un país en desarrollo.

Sin embargo, los hechos del 2019 salpican ahora la política local cuando legisladores como Hermann Tertsch, del parlamento europeo reclaman por las represalias que han desencadenado dichos hechos, hasta hoy calificados como sucesión presidencial por unos o golpe de Estado por otros.

Las respuestas discursivas del oficialismo en torno a la soberanía y al respeto de las cuestiones internas de Bolivia no se hicieron esperar. Único contra-discurso válido por cierto.

Pero en política internacional la tribuna no cuenta tanto como dentro del país. Se sabe que hay dependencias que van más allá de las diatribas y los discursos.

También se sabe qué exigir en resoluciones como la (RC-244/2021) no son otra cosa que factores de presión para que no ocurran otras.

 De este modo, la verdadera incidencia política real hoy pasa por las señales que se emitan de un lado o del otro.

 En política nadie accede al poder por error u omisión. Menos por desconocimiento. Añez puede no haber cumplido una agenda de reformas comprometidas con sus aliados. Quizás porque no supo medir las graduaciones de las mismas, quizás porque no quiso pese a sus compromisos o quizás porque no pudo lograr los necesarios apoyos.

Sea como fuere, esas reformas que no se llevaron a cabo, están en ahora en la memoria de quienes se vieron sin el poder por más de un año.

Para que nadie las vuelva intentar es que, desde el oficialismo, se opta por un camino duro de aleccionamiento vía judicial. La errática oposición apela a tocar las puertas de los que tienen accesos a los lobbys internacionales de inversiones para sancionar a Bolivia dentro del contexto internacional.

Al igual que en el ajedrez, tan solo se han movido apenas los trebejos de la apertura. Si se trata de un largo partido o de un rápido jaque mate pastor se verá de acuerdo a los hechos por venir en los próximos meses. Aunque lo más probable que el oficialismo decida poner paños fríos a cambio de asegurar su continuidad, hoy dañada por los magros resultados electorales de las últimas elecciones sub-nacionales o elecciones autonómicas.