Luis Escóbar  / La Paz

Ante el retraso de la llegada de la  segunda  dosis de la vacuna rusa Sputnik V, el Gobierno  ensaya al menos tres  alternativas: usar  un  segundo componente de otro laboratorio distinto al ruso, dejar a las personas con una sola dosis por su “alto nivel de inmunidad” y reiniciar el cuadro de inmunización. El Ejecutivo hace un estudio del caso.

“Es una de las alternativas que se está analizando”, declaró el viceministro de Comercio Exterior, Benjamín Blanco, respecto a la posibilidad de usar la vacuna de otro laboratorio como refuerzo a la primera dosis Sputnik V. “(Esta alternativa) no sólo se analiza en Bolivia,  sino en varios países. Estamos en contacto con otros gobiernos que atraviesan la misma dificultad. Compartiremos  estudios. Es algo que se tiene que hacer a la luz de las investigaciones y la evidencia científica”, sostuvo.

Blanco hizo  ayer esta afirmación,   dos días después de la declaración del   viceministro de Gestión del Sistema Sanitario, Álvaro Terrazas, quien descartó ese camino.  “No es posible la combinación de dosis (porque) en este momento todos tenemos un registro nominal (…) y están pendientes nuestra  segunda  dosis. Hay algunos países que han estado considerando el intercambio,  (pero)  nosotros no porque tenemos garantizadas esas vacunas”, dijo.

Jorge Richter, vocero presidencial,  planteó otras dos salidas a este problema. La primera se refiere a que  las personas que recibieron la primera dosis  de Sputnik V se queden con este único componente porque tiene una efectividad del 80%.

Esta propuesta fue lanzada considerando que las dos dosis de la vacuna Sinopharm tienen una efectividad del 79% para prevenir casos severos de Covid-19, según la Organización Mundial de Salud (OMS). Además, el ministro de Salud, Jeyson Auza, dijo que la efectividad de la vacuna Johnson & Johnson (J&J)  llega a un 63,3%.

Richter también sugirió en una entrevista con El Deber Radio   una tercera salida: la “vacunación desde cero”.

Las alternativas son ensayadas por el Gobierno ante la demora del arribo de 200 mil  segunda   dosis  de la vacuna rusa. Estos fármacos debían arribar al país el 20 de julio para continuar la inmunización  de los adultos mayores de 60 años que recibieron el primer inoculante en  abril.

Ahora, este grupo exige  la segunda dosis. Las protestas comenzaron el pasado  jueves en diferentes regiones del país. En La Paz la molestia se  inició el lunes con el bloqueo de vías. Ayer se registraron protestas en la calle Genaro Sanjinez,  donde se debía aplicar la segunda  dosis a los asegurados de la Caja Nacional de Salud (CNS) y en la avenida Rafael Pabón (Irpavi), donde está el vacunatorio de  la Escuela Militar de Ingeniería (EMI).

La viceministra de Seguros de Salud, Alejandra Hidalgo, anunció anoche que el Gobierno realiza un estudio para determinar qué acciones tomará el país respecto a la carencia de la  segunda  dosis de la vacuna rusa.

En  Red Uno, la autoridad dijo que coordinan este trabajo con instancias de España y Rusia, además de profesionales y médicos de Bolivia. Aseguró que la próxima semana habrá novedades.

El retraso en la llegada del lote de 200 mil vacunas Sputnik V -que debía arribar la anterior semana- afectó hasta ayer  en un 3% la aplicación del total de la  segunda  dosis. Pero este porcentaje se incrementa cada día porque para cada jornada hay  beneficiarios que fueron programados para recibir el inoculante. Ayer, la viceministra Hidalgo reconoció que el retraso ya es de cinco días.

Hasta la fecha, 1,3 millones de personas recibieron  la segunda dosis de las vacunas según el reporte emitido por el Ministerio de Salud.  Esta cantidad equivale al 18,8% de los 7,1 millones de ciudadanos mayores de 18 años del país. Si se hubiera cumplido con  las 200 mil unidades de la vacuna rusa que tenían que llegar la anterior semana, el porcentaje habría incrementado a 21,7%.

Blanco agregó que el país no está en condiciones de sancionar las  demoras. “No hay ningún país que haya firmado con alguna empresa farmacéutica que incluya sanciones. (Los laboratorios) se protegen en sus contratos y saben que hay factores que no controlan:   la provisión de insumos o   las restricciones gubernamentales”, dijo.

Bolivia expresó su “preocupación” a Rusia por el incumplimiento en el envío de la  segunda  dosis. “El canciller (Rogelio Mayta) sostuvo una reunión con el canciller de Rusia explicando nuestra preocupación y molestia por el incumplimiento. Se están haciendo todas las gestiones para asegurar la  segunda dosis”, dijo.