La Paz, 31 de julio.- Los incendios en Bolivia son un debate permanente y cada año suman las regiones y pueblos afectados. Un reciente informe del Centro de Estudios Jurídicos e Investigación Social (Cejis) establece que en los últimos 10 años, de 2010 a 2020, la superficie de quema

acumulada, dentro de los 58 territorios indígenas, alcanzó a 5.229.872 hectáreas.

Las regiones en las que esta afectación se presentó con mayor daño fueron: la Amazonía norte y sur, la Chiquitanía y el Chaco. En este periodo, los años  con mayor relevancia de afectación de quemas fueron: 2010 con 1.246.886 ha (55%); 2019 con 635.578 ha (28%); y 2020 con 398.960 ha.

De acuerdo a este documento, son 15 territorios de la Amazonía afectados y quemados en esta década y suman una superficie de 2.753.083 hectáreas. “Del total de territorios indígenas, tres sufrieron una mayor afectación a la superficie titulada: Movima con 16.504 hectáreas, con un porcentaje de 276,5%; Cavineño 882.815 ha, con 187%; y Cayubaba, con 316.272 ha, equivalente a 184,36%”.

El Cejis difundió esta publicación de Incendios en los territorios indígenas de las tierras bajas de Bolivia. Análisis del periodo 2010-2020, que refleja el impacto que sufrieron los territorios indígenas por el fuego acumulado durante una década, resultado de distintos factores, entre ellos, las políticas estatales de ampliación de la frontera agrícola.

Entre los pueblos afectados se encuentras el territorio Movima I y II se encuentra en el departamento de Beni, en el municipio de Santa Ana de Yacuma. Cuenta con un área titulada que alcanza una superficie de 5.969 ha, integrada por 28 comunidades (tres se encuentran dentro del área número I del territorio y 25 en el área II). “En los últimos 10 años, a consecuencia de los incendios forestales, el territorio sufrió un daño acumulado de 16.504 ha. El 2010 fue uno de los años con mayor extensión afectada, llegando a una superficie de 12.683  ha, es decir, el 212% del territorio titulado”, detalla el informe.

El territorio Chacobo–Pacahuara se halla en el departamento de Beni, entre los municipios de Exaltación y Riberalta. Cuenta con una superficie titulada de 485.414 ha y se conforma por 13 comunidades. “Durante los últimos 10 años, el territorio se vio afectado por los incendios forestales en una extensión de 320.727 ha, correspondiente al 66,07% del total de su superficie”.

El territorio y Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS) se encuentra entre los departamentos de Beni (San Ignacio de Mojos) y Cochabamba (Villa Tunari). Cuenta con un área titulada que asciende a una superficie de 1.091.656 ha. “En los últimos 10 años, el territorio alcanzó un porcentaje de 28,64% de afectación por quemas, con una superficie acumulada de 312.651 ha”.

La región de la Chiquitanía se caracteriza por la presencia de importantes territorios indígenas de propiedad de los pueblos Ayoreode, Chiquitano, Guarayo y Yuracaré-Mojeño. Es la región en la que se encuentran importantes extensiones de tierra y que en los últimos años ha sufrido la mayor presión por la expansión de la frontera agrícola para la producción de monocultivo.

“Los territorios indígenas con mayor afectación acumulada por incendios, en el periodo 2010-2020 son: Pantanal, con una superficie de 347.343 ha (48, 23% de su totalidad); Monte Verde, con 322.669 ha (33,11%); Guarayo, con 248.717 ha (18,5 %); Lomerío, con 245.876 ha (94,8%); Bajo Paragua con 198.271 ha (53%); Santa Teresita, con 114.866 ha (148,13%); Zapocó, con 27.462  ha (63. 36%); Rincón del Tigre, con 23.825 ha (24. 38%); Turubó Este, con 21.583 ha (21, 31%) y Tobité, con 4.136 ha (15,85%)”, afirma el informe de Cejis.

Para acceder al estudio del Cejis sobre quemas e incendios en territorios indígenas: