Fuente: Publico.bo
En un nuevo episodio del espacio digital “De Frente con Oscar Ortiz”, José Antonio Nogales habló sobre el Código Tributario boliviano, los factores que afectan el grado de seguridad jurídica y la incertidumbre en las reglas tributarias.
Nogales es abogado experto en política, derecho y administración tributaria. Es profesor de pregrado y posgrado en esa materia, y participó en el análisis y discusión de las principales normas impositivas vigentes en el país.
“El Código Tributario de 2003 fue bien estructurado, pero las modificaciones que se le han practicado en los últimos años han deslucido algunos de los elementos que daban garantía y seguridad jurídica a los contribuyentes”, dijo.
El experto opinó que deberían incorporarse al Código “los derechos y garantías que establece la nueva Constitución, no sólo en política fiscal sino también en otros aspectos que tienen incidencia, como la propiedad privada”.
“En el 2008, el Instituto Latinoamericano de Derecho Tributario aprobó la Carta de los Derechos del Contribuyente. Deberían incorporarse los elementos más importantes de esa Carta, sobre todo en lo referido a la no aplicación retroactiva de las normas”, propuso.
Nogales cuestionó el mal uso de la Ley Financial, que ha sido utilizada para hacer modificaciones al Código Tributario y a la Ley General de Aduanas, remarcando que esa norma debe cumplir con los principios de materialidad y temporalidad.
“Materialidad, en todo lo que tiene que ver con ingresos y gastos. Y temporalidad, ajustándose al ejercicio fiscal del presupuesto, sin incluir cambios permanentes”, especificó.
El tributarista también indicó que “la relación entre el fisco y los contribuyentes debe ser horizontal, de igualdad”, con sanciones proporcionales. En ese marco, señaló la necesidad de volver a la prescripción de las deudas tributarias, y de distinguir la sanción de la defraudación tributaria y de la simple omisión, que actualmente tienen la misma pena.
En el balance, Oscar Ortiz destacó que las reglas de juego tributarias “permiten o no hacer más o menos empresas”. “Hay que generar un debate para buscar el equilibrio entre el interés estatal de recaudar y un nivel de tributación que haga de nuestro país un entorno favorable para atraer la inversión”, concluyó.