Desde que Villegas llegó a la dirección técnica del cuadro cruceño no cobró ni un sueldo, ni en la gestión de Juan Jordán ni en de la de Bendeck.
Fuente: paginasiete.bo
Eduardo Villegas cerró anoche uno de sus peores ciclos al mando de un equipo boliviano. Rescindió contrato con Blooming, después de una reunión con el presidente transitorio, Carlos Bendeck. La directiva del club cruceño se comprometió a pagar, en cuotas, los siete meses adeudados.
Los malos resultados acumulados por el equipo cruceño empujaron a Villegas. La derrota sufrida ante Guabirá por 2-4, en Montero, selló su salida. Blooming es antepenúltimo en la tabla, con 14 puntos.
“Me voy triste porque queríamos dar algo más al club, queríamos ofrecerle algo más, principalmente, con los resultados. Los objetivos eran altos, pero esta crisis nos ha afectado y el efecto es al fusible más fácil: el cuerpo técnico”, declaró Villegas, luego de reunirse con Bendeck.
Desde que Villegas llegó a la dirección técnica del cuadro cruceño no cobró ni un sueldo, ni en la gestión de Juan Jordán ni en de la de Bendeck.
“Quiero que quede claro, parecería que queremos cobrar todo, pero no cobramos en siete meses. Entramos en un plan de pagos y cobraremos en el transcurso del tiempo, sin meterle presión a la dirigencia con los plazos que hemos acordado”, explicó el cochabambino.
Villegas se despedirá hoy del plantel profesional; en la ocasión Bendeck presentará al entrenador argentino Hernán Meske como el reemplazante. Meske estaba a cargo del equipo de reserva y conducirá al plantel profesional hasta fin de temporada, aunque esto está condicionado a la decisión del directorio entrante.
La salida de Villegas también responde al mal momento que atraviesa Blooming a nivel institucional.
