Dos embajadores son acusados de injerencia por marchar con Morales

Los representantes de Argentina y Nicaragua respaldaron la caravana y al Ejecutivo. La oposición señala que estamos frente a una intromisión. En cambio, en el MAS niegan que se trate de aquello.

Los embajadores de Argentina, Ariel Basteiro, y de Nicaragua, Elías Chévez, son acusados de injerencia por marchar con  el expresidente Evo Morales en la denominada caravana “por la patria”. Ambos respaldaron al Gobierno y a Morales durante su visita a la columna.  El Movimiento Al Socialismo (MAS)  niega  que se trate de intromisión.

El jueves, el embajador Basteiro visitó a la caravana y aseguró que “siempre es bueno estar en calle, ganar la calle, salir a defender al pueblo estando en la calle”. El representante sostuvo que “Evo no está solo, Lucho no está solo y Bolivia no está sola”.



Ayer, el embajador de Nicaragua  se presentó en  la columna y respaldó al gobierno de Luis Arce. “El presidente Arce no está solo, por eso esta marcha en la que estamos caminando junto a ustedes”, indicó el diplomático.

Basteiro  no se pronunció ayer ante  los cuestionamientos. Chévez, en la marcha junto a Morales,  rechazó las sindicaciones de intromisión. “Nuestra lucha es por  nuestros pueblos y que no nos vengan a acusar de injerencia,  porque nos une una lucha histórica”.

En contacto con Página Siete, la excanciller Karen Longaric sostuvo que Basteiro y Chévez vulneraron el artículo 41 de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas, el cual señala que “están obligados a no inmiscuirse en los asuntos internos” del Estado receptor.

El diputado de Comunidad Ciudadana Alejandro Reyes expresó que hay una clara injerencia política, lo que deja en evidencia la doble moral del Ejecutivo.

“Ellos deben explicar cuándo es injerencia y cuándo es cooperación y es una pena que no lo sepan explicar. Esta mañana, en algunos de los medios, algunos diputados del MAS no han podido explicar la diferencia entre ambas acciones. Entonces, está más que claro que hay una injerencia total y es condenable”, declaró.

El embajador  de Argentina visitó la caravana el jueves. Foto: Faceboook Evo Morales

 

La oposición  de Argentina también cuestionó a Basteiro. El diputado electo de Juntos por el Cambio (JxC) Gerardo Milman anunció que el caso será tratado en el Congreso de su país.  “Que Basteiro marche en una marcha política está prohibido por los tratados internacionales, de los cuales Argentina es suscrita como la Convención de Venecia. (…) Su acto de injerencia merece nuestro total repudio”, expresó a este medio.

La presidenta de PRO, sigla que integra JxC, Patricia Bullrich, sostuvo: “Es un gravísimo error lo que ha hecho Basteiro, merece toda nuestra condena y vamos a pedir todas las explicaciones  a la Cancillería y deberá irse ese embajador, no se puede quedar, porque no representa a toda la Argentina”.

Rubén Gutiérrez, senador del MAS, negó que haya injerencia política. “La libertad de acción, la liberta de locomoción, la libertad de expresión que tienen personalidades en el ámbito diplomático que están radicados aquí en Bolivia es absolutamente en ese marco”, aseguró el legislador.

El oficialista  aseguró que “la marcha histórica del pueblo boliviano por defender la patria” es saludada no sólo dentro del país, sino en la comunidad internacional que comparte el proceso histórico que vive Bolivia.

La excanciller Longaric indicó que, en este caso, las sanciones diplomáticas consisten en el retiro de los embajadores que se inmiscuyen en los asuntos internos, pero el Gobierno es amigo de ambos representantes.

“Por eso es que yo decía que tendrían que organizarse marchas y pronunciamientos pidiendo su retiro de territorio boliviano, porque es una sanción moral muy fuerte que el pueblo los repudie”, aseguró.

Álvaro del Pozo, analista en temas internacionales, expresó que este tipo de acontecimientos lo único que traducen es una intencionalidad de convertir la relación diplomática en una relación de colaboración político-partidaria.

“Esto es un producto más de la excesiva ideologización de las relaciones diplomáticas que han hecho los gobiernos que pertenecen al Socialismo del siglo XXI, una ideologización que está claro que, a lo largo del tiempo, ha demostrado que no ha generado beneficio para los estados. En el mejor de los casos, simplemente el beneficio ha sido para los gobernantes de turno”, manifestó.

Punto de vista

Álvaro del pozo / Analista

 

No entrometerse,  es el ABC de los   diplomáticosLa diplomacia además de estar codificada en la Convención de Viena sobre relaciones diplomáticas, a lo largo de su historia, ha venido adquiriendo formas que han sido respetadas como parte del derecho consuetudinario y una de esas es, por supuesto, el respeto a la no injerencia en los asuntos internos. Es el ABC de los diplomáticos que deben cumplir a raja tabla. Es decir, no entrometerse en los asuntos internos de los Estados.

Por supuesto que la marcha que lidera el expresidente Evo Morales es un tema doméstico de política interna, de reivindicación de un hecho que preocupa y ocupa a los bolivianos en su momento, pero que es de la agenda interna. La presencia de un embajador que es representante de un Estado en la formalidad de representante de un Estado, pues, rompe esta forma y este criterio, porque es una manera de manifestarse como representante de una tienda política, de un gobierno y no de un Estado.

Las relaciones diplomáticas entre Bolivia y Argentina y entre Bolivia y todos los países con los cuales se mantiene son, pues, de Estado. No concluyen ni empiezan cuando hay cambios de Gobierno.

Pueden tener mejores momentos, peores momentos, pero las relaciones son históricas y con Argentina muchísimo más. Este tipo de acontecimientos lo único que traducen es una intencionalidad de convertir la relación diplomática en una relación de colaboración político-partidaria.