Gamificación en banca: el juego al servicio del cambio

Por Victoria Martinez, Gerente de Desarrollo de Negocios e Inteligencia Artificial en Red Hat

La industria del videojuego ya tiene más de 40 años de vida y no da signos de detenerse. Al contrario, cada año que pasa nos sorprendemos con su crecimiento, siendo un sector que acapara ingresos aún mayores a otras industrias ya consolidadas, como la música y el cine. Esto se debe principalmente a que cada día hay más “gamers” en todo el mundo, 200 millones sólo en Latinoamérica que consumen juegos en diferentes plataformas, desde celulares hasta una PlayStation.



Una de las formas a través de las que el videojuego manifiesta su crecimiento en nuestra sociedad, tiene que ver con las formas con las que este particular objeto de entretenimiento ha cambiado nuestras vidas. No solo encontramos juegos en un celular o una consola, sino que también diferentes empresas han incorporado herramientas lúdicas para poder generar mayor interacción con sus clientes e incrementar la fidelización del mismo. A esto podemos llamarlo “gamificación”.

Uno de los sectores que se ha insertado en la búsqueda de soluciones e ideas basadas en gamificación es el financiero de la banca tradicional, principalmente porque se trata de un espacio en donde en los últimos años ha aparecido mucha competencia. La llegada de espacios diferentes dentro de este ámbito, como las fintech y entidades bancarias digitales, hizo que la relación entre los bancos y sus clientes se viera modificada, lo cual provocó que estas empresas tuvieran que reinventarse para poder generar mayor engagement entre sus clientes y mantener su nivel de satisfacción.

En ese sentido, la gamificación aparece como una variante más que interesante para que los bancos  puedan desarrollar opciones de relacionamiento diferentes para  sus clientes, sobre todo los de una generación más joven, acostumbrada a la resolución instantánea de sus necesidades que les da la vida digital actual.

Por ejemplo, el banco estadounidense The Movenha creó CRED, un sistema ludificado que ayuda a los clientes con sus decisiones financieras de rutina. En el mismo país se lanzó Payoff, una herramienta en línea para administrar las finanzas personales a través de la definición de objetivos financieros y con alertas recordatorias de dichas metas.

Otro caso podría ser el de la plataforma PERFIQT, la cual apoyándose en la inteligencia artificial, permite realizar la planificación financiera tradicional a través de un proceso de preguntas y respuestas. En pocos minutos, el cliente puede visualizar proyecciones de inversión o jubilación, por ejemplo, y obtener un asesoramiento personalizado que le ayude a tomar decisiones adaptadas a sus necesidades.

Estos ejemplos demuestran que la gamificación en banca realmente no tiene límites y se encuentra, al igual que este sector, en constante evolución, brindando un agregado más que interesante a la manera en las que personas de todo el mundo deciden en qué invertir su dinero o planificar su futuro en base a su historia financiera. Esta revalorización de la relación con el cliente, que se da a través de aspectos relacionados con el mundo de los videojuegos, habla de una nueva cultura dentro del mundo financiero donde el proceso de adopción de la banca tradicional permitiría revolucionar la experiencia con sus clientes, cambiar de retener a enamorar es una nueva filosofía de vinculación que los bancos más innovadores están comenzando a implementar.

Empresas de tecnología en código abierto, como Red Hat, comparten esta visión y  filosofía del desarrollo comunitario de soluciones ajustadas a cada cliente. La cultura del open source es una manera de expandir y potenciar la innovación, de co-crear no tan solo con tecnologías abiertas con acceso a todas las comunidades sino de la manera donde los valores como la libertad, la colaboración y la transparencia son los factores que traccionan estos cambios en el mundo.

La gamificación junto a soluciones con inteligencia artificial aplicada a contenedores permiten acelerar el desarrollo de nuevas aplicaciones inteligentes, disminuir el time to market y optimizar los costos asociados a la infraestructura y gestión del flujo de trabajo. Es decir, cómo hacer para ir más rápido, más livianos en costos pero con la seguridad que nos caracteriza. Un desafío que hoy marca la diferencia entre los que se adaptan y los que quedan atrás frente a las presiones de un mercado cada vez más exigente.

En Red Hat consideramos que todo este tipo de soluciones funcionan como puente ideal para que empresas financieras logren implementar sus estrategias comerciales basadas en la gamificación y puedan adaptarse a una modernidad donde lo digital es clave para mantenerse a flote.

Es con base en estas alianzas entre industrias del software y entidades bancarias que se gestan los cimientos de un nuevo modelo de usos y costumbres bancarias, transformando así la práctica cotidiana entre el banco y sus clientes. Los bancos digitales y entidades financieras se están transformando para anticiparse a un proceso que ya se viene gestando, y para el cual la gamificación se presenta como una alternativa interesante que puede generar infinidad de posibilidades.

Fuente: Red Hat