La microeconomía es el estudio y análisis del comportamiento y decisiones de los agentes económicos (empresas, hogares e individuos) y su interacción con los mercados; el comportamiento de los agentes económicos respecto al paro cívico trae consigo decisiones, muchas veces dramáticas, para “amortiguar” los embates de dicha medida cívica.
En toda economía se tiene a los productores de bienes y servicios y consumidores, cuando los dirigentes del paro indican que fue “todo un éxito”, debemos suponer que todas las fábricas dejaron de producir, las oficinas de servicio como la gobernación y municipios también, la pregunta surge ¿los empleados recibirán su sueldo completo?, o ¿se les descontará por los días no trabajados?, en el aspecto privado si deciden pagar, las empresas acarrearán un alto costo financiero al erogar sueldos y no recibir recursos, de negarse a pagar los trabajadores sufrirán un desajuste presupuestario porque no tendrán como cubrir sus gastos por los días no trabajados y lo peor, no podrán acudir al Ministerio de Trabajo porque de hacerlo seguro quedarán sin fuentes de trabajo.
=> Recibir por Whatsapp las noticias destacadas
Asimismo, existen trabajadores por cuenta propia como ser los transportistas, albañiles, técnicos, comerciantes y otros oficios, o sea los que viven del día a día, este sector es el que más desajustes financieros sufrirá, ya que sus costos básicos y esenciales (vivienda, alimentación, agua, luz gas y otros) deberán ser cubiertos por sus ahorros (en el mejor de los casos), con acceso a créditos o entrar en mora, cualquiera de estos generará un desajuste financiero que tardaran en recuperar.
Cuando los organizadores establecen días y horas para que la población se “reabastezca” de alimentos, la pregunta es ¿podrá reabastecerse un albañil?, un chofer, un técnico de celulares que no generaron ingresos por apoyar el paro, la respuesta seguramente será que habrá “ollas comunes”, sin embargo, eso no podrá cubrir el pago de alquiler el pago de luz, agua y otros servicios.
También estos dirigentes, dicen que el sacrificio que hace el “pueblo hoy” es para que en un futuro no pierdan sus bienes, y nuevamente ¿los que viven en día a día, no perderán en el presente su casa o su taxi y otros bienes que sacaron a crédito?, porque es evidente que las entidades financieras no perdonan la mora y tienen el sustento legal de la expropiación (quitarles su garantía).
No es lo mismo acatar el paro, teniendo un ingreso mensual fijo que incluso traerá un aguinaldo y no sufrirán ningún desajuste financiero, que acatar el paro cuando se priva a la mayoría de los agentes económicos de generar recursos, lo cual evitara el cumplimiento de la mayoría de sus obligaciones y recordarles que los hombres “no viven solo de pan” existen otras obligaciones que afecta sobre todo a los más desposeídos; ojalá, que estos trabajadores que viven del día a día recuperen financieramente y logren cubrir sus necesidades básicas y si es posible poder comprar un juguetito destinado a sus niños.
Miguel Angel Marañón Urquidi