El técnico de Bolivia, tras la victoria contra Uruguay, dijo que la felicidad no está completa porque viene recibiendo amenazas.
Pese al triunfo de la selección boliviana por 3-0 contra Uruguay la tarde de este martes en el estadio Hernando Siles, la felicidad para el técnico César Farías no es completa porque denunció que viene recibiendo amenazas en contra de él y de su familia.
“Muy contento por la victoria y por el nivel de juego, por la cantidad de goles, por el trabajo. Vamos cuatro meses y medio concentrados con los jugadores, un gran esfuerzo hecho por los jugadores”, empezó diciendo Farías tras el partido mientras abordaba el bus para dejar el estadio.
Y sorprendió diciendo que su felicidad no está completa por muchos factores. “Hay muchas cosas como para estar feliz pero la felicidad no es completa. He estado sufriendo amenazas esta semana, cuando me toca retornar al país es un problema en extranjería. Hoy recibí amenazas porque no convoqué o porque no metí a un jugador”, aseveró el seleccionador venezolano.
“Y hoy cuando acabó el partido llegaron acusaciones de circunstancias personales. Sé afrontar las cosas pero no estoy dispuesto a poner a mi familia en riesgo”, añadió.
No confirmó si continúa al mando de La Verde o si romperá el vínculo que tiene con la Federación Bolivia de Fútbol. “No soy responsable de lo que ha sucedido acá por décadas. Ya no tengo 30 años para estar peleándome con un sistema completo. Me sentaré con el presidente Costa en los venideros días y analizaremos esto porque en el momento que tengo disfrutar se me viene a amenazar a mí a mi familia”, culminó diciendo el venezolano.
El vínculo
El estratega venezolano César Farías tiene un contrato firmado con la Federación Boliviana de Fútbol hasta marzo de 2022. Asumió la dirección técnica en agosto de 2019.
No se conoce la cifra del monto económico por una rescisión unilateral.