Ronald MacLean Abaroa, exministro de Hacienda, advirtió que el elevado gasto del Presupuesto General del Estado (PGE) 2022 será difícil de financiar porque este año ya hubo problemas para colocar bonos soberanos en el exterior.
Explicó que para el próximo año los 2.000 millones de dólares que se prevé emitir en bonos soberanos tampoco será posible concretar y se va a tener que solicitar el apoyo del Fondo Monetario Internacional (FMI), pero con condiciones.
“Se busca asfixiar a las empresas y personas con más impuestos porque no hay de dónde sacar más recursos, ya que se cerraron los créditos externos”, precisó.
La exautoridad criticó el elevado gasto corriente y las inversiones millonarias en empresas estatales antieconómicas y la elevada nómina de empleados públicos que -dijo- se ha triplicado hasta el medio millón.
“Lo peor en Bolivia es que el PGE es del tamaño total del PIB. Todos los bienes y servicios en un año son el valor del PIB, pero el presupuesto del Gobierno es equivalente. Se ha diseñado un PGE con gastos tan altos para no tener límite, pero no hay ingresos. Y un 15% a 20% va a empresas públicas que pierden plata”, precisó.
El pleno de la Cámara de Diputados aprobó la madrugada de ayer el PGE 2022 que prevé un 5,1% de crecimiento, una tasa de inflación de 3,4%, un déficit en torno al 8% del PIB y 5.015 millones de dólares de inversión estatal.