El equipo cochabambino derrotó por 2-1 a Universitario de Sucre en el partido de ida que se jugó en el Félix Capriles. La vuelta puede ser el sábado 11.
Universitario de Vinto aprobó ayer su primer parcial para graduarse en la final de la Copa Simón Bolívar 2021, luego de imponerse 2-1 a Universitario de Sucre, en partido de ida que se jugó en el estadio Félix Capriles.
La “U” sacó ventaja de su localía y en la vuelta, que podría ser el sábado 11 de diciembre (aún por confirmar) en Sucre, le bastará un empate para ser profesional. Los minutos iniciales fueron de estudio y análisis del planteamiento que presentaron ambos entrenadores.
El asedio visitante no cesó en su mejor momento en la cancha, siendo que una falta sobre Argüello en el área se cobró como tiro penal a los 23’ PT. Un minuto después, Ronald Gallegos ejecutó la falta y abrió el marcador (0-1). Lejos de amilanarse, el coraje vinteño salió a flote con las llegadas de peligro y la proyección del colombiano Andrés Llano. Universitario de Vinto controló el balón, pero pecó en hacer “una jugada demás”, en un afán desesperado de llegar a inquietar el arco de Iván Brun.
En el complemento, el local salió con todo dispuesto a matar o morir. De entrada, una jugada de Llano sobre el arco de Brun entrañó riesgo y el empate rozó la tarde valluna, pero a esa altura no se había hecho aún presente. El juego de la “U” vinteña no era sólo lateralizado, también copó el centro del campo de juego y el aluvión albo comenzó a decir presente en una tarde gris y bajo amenaza de lluvia. Las luminarias se encendieron, dando una luz de esperanza a la afición cochabambina que se ilusionó con la igualdad. La “U” valluna supo adminsitrar bien el juego y a los 21’ ST llegó el empate, tras una serie de errores en la zaga capitalina y el remate final de Ramiro Mamani que fusiló el pórtico de la visita (1-1).
Foto: APG
El tanto del empate desató una pelea en las gradería norte, donde la barra capitalina y los espectadores cochabambinos se agarraron a golpes, incluso una persona activó un petardo en ese sector. El empate dio inicio a otro cotejo. El Albo era superior y eso se fue reflejando más en el campo de juego. El segundo tanto era inevitable. Y llegó en el momento preciso, cuando a los 30’ ST un centro largo al área azulgrana fue interceptado por Llano, quien definió magistralmente ante Brun (2-1).
Al final, Universitario de Vinto dio el primer golpe de autoridad sobre la mesa. Con perfil bajo, humildad y sin sobrar al rival ganó 2-1.
