Cerca de 300.000 hectáreas de soya perdidas o en riesgo por las lluvias y desborde de ríos

La Asociación Nacional de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo), estima que las pérdidas pueden superar los 70 millones de dólares, y aún no ha terminado la temporada de lluvias.

Pese a las adversidades climáticas y de las carreteras, las exportaciones no tradicionales de Bolivia, entre las que se encuentran la soya, han superado en exportaciones a los hidrocarburos.

Ante este panorama surge la pregunta ¿Qué se necesita para ayudar a los productores agrícolas? ¿Qué políticas se deberían desarrollar para ayudar a los pequeños y medianos productores?