El caso de Maximiliano Dávila, exjefe antidrogas involucrado con el narcotráfico, fue uno de los temas abordados con periodistas en el programa Piedra, papel y tinta, de La Razón. Los entrevistados coincidieron en que ello es una muestra de la corrupción en la Policía y la presencia y penetración del narco en el país desde los años 70.

El espacio es conducido por la directora de La Razón, Claudia Benavente, y contó este jueves con la presencia de los periodistas Claudio Rossell (también docente universitario), Gróver Yapura (director de la revista Oxígeno, el semanario El Compadre y el portal urgentebo.com) y Freddy Morales (corresponsal de Telesur en Bolivia).

Dávila se encuentra con detención preventiva en la penitenciaría paceña de San Pedro, por ahora acusado de legitimación de ganancias ilícitas. Se lo relaciona con un grupo del narco liderado por Jorge Roca Suárez, alias Techo ‘e Paja, y el exmayor policial Omar Rojas, aprehendidos en Perú y Colombia, respectivamente.

Aparte, un informe de un agente infiltrado de la DEA de Estados Unidos señala que Dávila está involucrado con el negociado para un envío de droga a República Dominicana, entre 2019 y 2020. En el documento se indica que el entonces director de la FELCN ofreció al grupo incluso aeropuertos y dos escoltas policiales.

Rossell afirmó que el caso es una manifestación más de la presencia del narco en Bolivia desde los años 70 y que ahora resta saber hasta dónde llega la vinculación del exdirector de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (FELCN) que, según la DEA, ya tenía relación con negociados ilegales desde mediados de 2019.

Mientras que Yapura criticó que la Policía no ha sido sometida a cambio alguno, lo que permite que en la entidad siga “incrustada la corrupción”. “La Policía nos da seguridad cuando quiere”. Asimismo, destacó que los datos proporcionados por la DEA tienen relación con los presentados el miércoles por el Ministerio de Gobierno.

Por su parte, Morales dijo que el caso Dávila demuestra que existe una red de protección a grupos del narcotráfico en el país. Aparte, sobre el intento de relacionar al exjefe antidrogas con el expresidente Evo Morales, expresó sus dudas sobre la participación de la DEA, que no investigó a Morales en los 14 años de su gobierno.

Sobre las intenciones de forzar esta vinculación y/o sobre el manejo de la información por parte de algunos medios de comunicación, Rossell indicó que hay medios que realizan comunicación política en vez de periodismo. Freddy Morales añadió que se nota un activismo político por parte de algunos medios, que aplican una campaña abierta contra Evo Morales, con una “actitud maliciosa y con una falta de ética”.