Cuentos que parecen historias o al revés, en la república y el estado populista cocalero

La historia oficial es un conjunto de mentiras consensuadas”. Pukymon.

Cuentos de Santa Cruz de antaño, aprendiendo inglés.



En los años sesenta del pasado siglo, un Dirigente del MNR del Norte cruceño y muy conocido, informo a su gente que él había viajado a los Estados Unidos y solicitado su apoyo para construir el puente que demandaban las bases, sobre el río Piraí entre Montero y Portachuelo.

Tiempo después el Gobierno Norteamericano dono y construyo un puente Bailey de 280 metros de longitud. Estos puentes portátiles se ensamblan rápidamente y fueron utilizaron en la segunda guerra mundial para facilitar el avance de sus tropas.
El puente sobre el río Piraí fue construido e inaugurado en el año 1964 y se lo llamo Puente Eisenhower. Cuando los seguidores del Cochi le preguntaron por qué no se llamaba Cochi Chávez como él había anunciado, explico que el nombre estaba en inglés, pero que Eisenhower en castellano significa Cochi Chaves.

Las noticias y los cuentos nos llegan de todas partes.

Tiempo atrás, en España se escuchaba una historia: “En un lugar de la Mancha, de cuyo nombre no quiero acordarme, no ha mucho tiempo que vivía un hidalgo de los de lanza en astillero, adarga antigua, rocín flaco y galgo corredor”. Cervantes.
Luego en el Estado Plurinacional la escuche parodiada: “En un Cato del Chapare, de cuyo nombre no quiero acordarme, no ha mucho tiempo que vivía un cocalero, de los de verga enhiesta, abarca antigua, perro flaco y e imilla pa’ cazar”. Pukymon.

Racismo y discriminación.

Hace tiempo en los felices días prepandémicos, fui a Sucre por asuntos familiares y aproveché para llevar a mi bisnieta a un paseo cultural por los hermosos edificios históricos de la Capital: la Casa de la Libertad, diversos museos, iglesias, plazas, mercados, el Castillo de la Glorieta y luego el Parque Cretácico, la choricería de la siete lunares, etc.

Al pasar por la Plaza principal vimos un grupo vociferante de masistas y cuentapropistas, que después del consabido bloqueo con gritos, cohetes y tucuimas, se dirigían hacia la periferia. Como íbamos en la misma dirección, los seguí para enterarme del motivo de su hazaña; ninguno sabía algo concreto, pero me contaron que estaban yendo a cobrar y después al mercado para comprar coca y comer unos chorizos. Como estaba con el grupo me acerque al pagador para recibir mis quintos; este me miro la cara y dijo: “q´ara eres”, y se negó a pagarme en una actitud francamente discriminatoria y racista. Le insistí que estaba en el grupo, pero se molestó y por seguridad decidí quedarme sin la propina. Otra vez será.

Economía plurinacional, extractivista e informal.

Se unen dos campesinos masistas y constituyen una Cooperativa, se contactan con los chinos y estos se hacen cargo de las operaciones mineras, traen grandes barcazas y circulan por los ríos amazónicos en las cabeceras andinas, extrayendo oro y sembrando mercurio. Una explotación aurífera y exportación ilegal que no paga impuestos ni regalías, si no coimisiones y deja ese reguero de mercurio que envenena los ríos y mata todo bicho que camina, nada o vuela.

La coca manda hasta en la moda.

En Cochabamba, por herencia española, se usaban los sombreros de color blanco y copa alta, que gustaba a las llajtamasis. Esta moda sombrera se mantuvo hasta los años cincuenta, época de repunte del Chapare como área de colonización a causa de la crisis económica y el cierre de las minas.

En esa época en la llajta empezó a fabricarse un sombrero para las mujeres del Chapare, este sombrero de paja y de ala ancha se inspiró en el que  lucía Vivian Leigh en la película “Lo que el viento se llevó”. Luego su uso se generalizó en las tierras bajas.

La tragedia de Jeannine.

Los masistas citan al Gobierno transitorio de Jeannine Añez, como la causa de todas las desgracias y penurias a las que diariamente nos enfrentamos los ciudadanos bolivianos; menos los masistas.

En una carta del 7 de febrero último y desde la Cárcel de Mujeres, Jeanine, explicaba: “Asumí la presidencia constitucional de Bolivia sin pedirlo, sin buscarlo y mucho menos esperarlo… con la única misión de llamar a nuevas elecciones y pacificar el país en convulsión, por culpa del fraude electoral y el abandono de sus funciones como presidente y vicepresidente, mediante renuncia y huida, de Evo Morales y Álvaro García Linera”.

Monseñor Gualberti, Arzobispo de Santa Cruz y previo a la instalación del Gobierno Provisional de Jeannine Añez declaraba: “Hay constancia de las renuncias en cadena en la lista de sucesión constitucional y otras evidencias, como el pedido de “guerra civil”, incendio de buses y hogares y paramilitares metiendo bala. Todos absueltos por “la justicia servil”.

El gobierno de Añez fue un gobierno de transición, un gobierno precario que estaba sitiado por los grupos sociales del masismo y especialmente por el Parlamento mayoritario del MAS. Jeannine era la Presidente interina, pero quien gobernaba era el MAS que tenía controlado y a su servicio el Parlamento, jueces, fiscales, policías, ejército y miles de funcionarios públicos en los distintos Ministerios. Su presunto gobierno era un enredo, un ch´enko que nadie creía, pero que ahora sirve para endilgarle a Jeannine todo el desastre y latrocinio del MAS desde el año 2006 y hasta ahora.

En realidad su gran error fue posterior, y es haberse dejado convencer para postularse a la Presidencia.

Fuente: ovidioroca.wordpress.com