Tres bolivianos que se encuentran en Kiev, en medio del ataque ruso, relataron, por medio de videos y fotografías, sus experiencias en medio del conflicto.
Fuente: paginasiete.bo
“No hay puente, lo explotaron. (…) Yo cada día iba por este camino a mi trabajo y ahora no sé qué decirles. Esto es inexplicable. Ésta es la realidad ucraniana. Estoy seguro de que no les muestran esto en la tele”, sostiene Luis Alberto Flores desde su refugio en las afueras de Kiev, la capital ucraniana, que desde el jueves se encuentra bajo ataque de las fuerzas rusas.
Desde el inicio del ataque armado de Rusia a Ucrania, el boliviano-ucraniano decidió relatar la situación que lo rodea. A través de videos en las redes sociales, el instructor de artes marciales revive para la comunidad internacional los acontecimientos en el país de Europa oriental y solicita ayuda para sobrellevarlos.
Como Luis Alberto, hay al menos 34 bolivianos en Kiev, que se han visto atrapados en el país por la invasión rusa. “Estamos con un pánico terrible… sólo rogamos a Dios el poder conservar nuestras vidas”, informó el jueves Vladimir Tordoya, excónsul boliviano en ese país.
El exdiplomático contó que en la comunidad boliviana no se reportaron bajas ni heridos. “Estamos pendientes y no podemos hacer nada, sólo orar y pedir a Dios para solucionar este conflicto bélico por la vía diplomática”, añadió.
Desde el refugio
Juan Pablo Behoyeguy es otro boliviano que reside en Kiev, desde donde publica fotografías y videos de la vida en los refugios antibombas instalados en la ciudad, en la cual gran parte de los residentes pasa la noche.
En sus videos se puede apreciar la oscuridad y hacinamiento en estos lugares, en los cuales se han refugiado los residentes que no pudieron salir de la capital ucraniana y que esperan que el ataque cese pronto.
Sin poder regresar a casa
En su más reciente video, el boliviano Flores mostró uno de los puentes que conectan Kiev con el interior, en un estado totalmente destruido. El joven aseguró que el daño fue realizado por el Ejército ucraniano para evitar que las tropas rusas entren a la capital.
Flores explicó que por ello no pueden retornar a su hogar en Kiev. Similar situación a la que describió su hermano Víctor, quien expresó el deseo de que su ciudad natal no sea destruida.
“Cuatro años atrás ya estábamos bajo presión de Rusia, ¡pero no podía pensar que voy a tener que correr de mi ciudad porque van a bombardearla! Ahora estamos a 20 kilómetros de Kiev esperando que mi ciudad natal no sea destrozada… Escuchamos como algo vuela encima de nuestras cabezas y no vemos y tampoco entendemos qué es”.
Más temprano, el instructor describió una situación “de terror” durante la pasada noche, por lo que instó a bolivianos y extranjeros a dejar las palabras y tomar acciones.
“Lo que se necesita ahora es hacer algo, no hablar. (…) Toda la noche nos han bombardeado, los tanques rusos están entrando, las Fuerzas Armadas se están defendiendo”, detalló.
“Hasta hace poco tiempo mi familia estaba dentro de un refugio antibombas que tenemos cerca, acaban de salir. No se imaginan lo que es estar ahí”.
Su hermano, Víctor, también publicó imágenes y videos de su situación en las afueras de la capital ucraniana.
“Estás tranquilo durmiendo y de pronto suena una sirena. Es un sonido muy feo que provoca mucho miedo”, relató Víctor, en una conversación con el canal Unitel.
“Fuimos atacados cerca de las 4:00. La fuerza aérea rusa ha ido destrozando todo lo que es la infraestructra militar de Ucrania. Los helicópteros pasaban muy cerca (…) tenemos información de que las fuerzas ucranianas han logrado detener un poco a los rusos”.
Cuenta que las autoridades han implantado ciertas medidas marciales. “Sólo una persona está autorizada a salir a comprar al supermercado, y hay un límite para los retiros de dinero en los cajeros, sólo el equivalente a 100 dólares por día”, agregó Víctor.
“El Gobierno nos ha dicho que si se puede, debemos abandonar el país o buscar refugio”.
Los bombardeos e incursiones terrestres de las tropas rusas en varios puntos del país, incluso cerca de la capital Kiev, ya han causado decenas de muertos en tan sólo horas.
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