‘Hay que tomar muy en serio a Putin’ en cuanto a la disuasión nuclear, según experto

En el quinto día de la ofensiva rusa en Ucrania, hacemos un balance de la situación estratégica con Frédéric Pons, periodista especialista en Defensa, autor del libro ‘Putin’ (Ediciones Calmann-Levy).

Un depósito de desechos radioactivos fue blanco de misiles rusos en la capital ucraniana. De momento, no hay daños ni fugas radioactivas. También hubo bombardeos este lunes en la ciudad de Járkiv. El Estado Mayor ucraniano indica, en un comunicado, que Rusia ha ralentizado el ritmo de su ofensiva.  

RFI: Cuando se cumplen cinco días de guerra, ¿podemos decir que la operación contra Ucrania no se está desarrollando de forma tan fácil para los rusos?



Frédéric Pons: Aunque no estemos al corriente de todo lo que está pasando, no creo que podamos hablar en esos términos. Cuando conocemos un poco el orden de batalla y la táctica del ejército ruso, podemos hacer dos observaciones. Por un lado, que el mayor esfuerzo del ejército ruso se concentra en estos momentos en el sur, desde Crimea, en el este desde el Donbass y en el norte, en la ciudad de Kharkiv. En Kiev, la capital, aún no podemos hablar de batallas. Hay escaramuzas, la ciudad está rodeada, hay algunos bombardeos, pero la batalla de Kiev todavía no ha comenzado. Aún estamos en el quinto día. Me acuerdo cuando Putin hizo la guerra en Georgia, en 2008, se necesitó una semana para que alcanzara su objetivo de guerra. Así que no creo que a estas alturas podamos hablar de dificultades para Putin. Además, aún no ha usado la totalidad de las fuerzas militares que tiene en la frontera. Ha utilizado el 50%. Tiene muchas reservas para cubrir todo el territorio ucraniano.

Este 28 de febrero, el ejército ucraniano se prepara para evitar una nueva ofensiva a gran escala contra la capital
Este 28 de febrero, el ejército ucraniano se prepara para evitar una nueva ofensiva a gran escala contra la capital © RFI Estudio Gráfico

RFI: Los ucranianos intentan resistir, tanto los militares como los civiles. Tienen armas suministradas desde el extranjero. La Unión Europea anuncia una ayuda militar de 450 millones de euros. ¿Será suficiente?  

Frédéric Pons: Primero de todo hay que destacar que esta ayuda es inédita, es algo completamente nuevo. Esto puede provocar temor del lado ruso, pero también hay que entender que hay que comprar las armas y transportarlas. Y luego, hacerlas llegar hasta el terreno y eventualmente acondicionarlas y formar a los soldados para que puedan usarlas. Esto puede llevar su tiempo. Y estamos en una carrera entre Putin y los ucranianos. Putin va a conseguir llevar muy rápidamente a sus objetivos de guerra. Me temo que la mayor parte de estas armas, en todo caso las más sofisticadas y que puedan hacer más daño al ejército ruso, lleguen un poco tarde. Igual no después de la batalla, pero tarde.

RFI: Este domingo, Vladimir Putin agitó la amenaza atómica. Puso en alerta a las fuerzas rusas de disuasión nuclear. ¿La guerra podría tomar una dimensión nuclear?  

Frédéric Pons: Hay que tomar a Putin muy en serio porque siempre ha puesto en escena el armamento nuclear de Rusia, es un orgullo para los rusos. Se ha mostrado en grandes ejercicios, donde el arma nuclear se usa, hasta el 19 de febrero, por ejemplo. Así que es algo importante. Después, hay varios grados en la puesta en alerta del arma nuclear rusa. No estamos en el nivel más rojo, el último. Estamos en el penúltimo estadio. En este momento, estamos ante una gesticulación, una escalada política en la que Rusia está diciendo a los europeos y los occidentales: “Atención, no vayan muy lejos. Nos van a hacer daño. Nos han declarado la guerra financiera, la guerra con las armas que ustedes han comprado… No vayan más lejos porque podría terminarse muy mal”.

Radio Francia Internacional