Pese a datos de la DEA, para fiscal Lanchipa no hay indicios de que Dávila sea narcotraficante

 

La DEA tiene una investigación desde 2019 por narcotráfico con audios e informes, pero en Bolivia, ni los fiscales ni la Felcn lo indagan.

 



Carlos Quisbert / La Paz

Pese a que la Corte del Distrito Sur de Nueva York, en Estados Unidos (EEUU), tiene investigación desde 2019 y solicitó la extradición de Maximiliano Dávila, exdirector de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn),  por tráfico de cocaína y de armas, el fiscal general Juan Lanchipa reveló ayer que en Bolivia el Ministerio Público aún no tiene indicios de que el exjefe antidrogas del gobierno de Evo Morales esté implicado en ese delito.

“El proceso de investigación se ha iniciado por legitimación de ganancias ilícitas y naturalmente es una investigación que recién está comenzando; el proceso va a continuar (…) y si es que se encuentran indicios o elementos para ampliar la investigación por otros delitos, sí se lo va a hacer”, dijo Lanchipa, al ser  consultado sobre la investigación contra Dávila.

El exjefe policial está detenido en el penal de San Pedro desde el 24 de enero, imputado por legitimación de ganancias ilícitas, debido a movimientos de dinero realizados por su hijo y compras de terrenos que no superan el millón de bolivianos.

La captura del exdirector de la Felcn se dio luego de que medios de prensa revelaran que la Administración para el control de Drogas (DEA) lo investiga por su vinculación con una red de producción y distribución de drogas.

La acusación del gran jurado de la Corte de Distrito de Nueva York emitió una acusación por conspiración para el tráfico de cocaína y armas contra Dávila y otras cinco personas.

El 2 de febrero, el Departamento de Estado de EEUU oficializó el pedido detención con fines de extradición para Dávila, además de ofrecer una recompensa de 5 millones de dólares, por la información que ayude a la condena del coronel en aquel país.

La Fiscalía de Bolivia aún no toma en cuenta que, según los informes de la DEA, Dávila ofrecía aeródromos para las avionetas que debían transportar más de 1.000 kilos de cocaína, con el resguardo de otros policías armados con metralletas. Asimismo, según audios “legalmente obtenidos” por agentes de la DEA, el grupo de narcopolicías, además de presumir su amplia experiencia en el narcotráfico, aseguraban tener contacto con altas autoridades del Gobierno.

Según Lanchipa, ninguno de estos indicios son de conocimiento de los fiscales.

“No sólo es una respuesta irresponsable por parte del señor Lanchipa. Lamentablemente, expresa nuevamente un sometimiento político a una determinación política expresada por el canciller Rogelio Mayta y el presidente del Senado, Adrónico Rodríguez, que rechazan la extradición solicitada por EEUU pese a todos los indicios que hay contra el señor Dávila”, criticó el diputado Saúl Lara, por Comunidad Ciudadana (CC).

Una respuesta irresponsable del señor Lanchipa. Lamentablemente expresa nuevamente un sometimiento político

Saúl Lara, diputado CC