Rusia bajo fuerte presión en la ONU para que cese invasión a Ucrania

La ONU abrió sesión extraordinaria sobre Ucrania donde llamó a un alto al fuego inmediato. En los próximos días se votará el proyecto de resolución que condena la invasión rusa y exigiría la retirada de sus tropas.

    
Antonio Guterres, secretario general de la ONU
Antonio Guterres, secretario general de la ONU

 

Fuente: DW



«¡Basta ya! Los combates deben cesar», dijo el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, tras la apertura este lunes (28.02.2022) de la sesión extraordinaria de urgencia de la Asamblea General que decidirá si condena o no la invasión de Rusia a Ucrania, tras el fracaso del Consejo de Seguridad.

Esta reunión extraordinaria de los 193 miembros de la ONU, la primera de este tipo en 40 años y undécima en su historia, inició con un minuto de silencio en memoria de las víctimas del conflicto iniciado el 24 de febrero con la invasión rusa de Ucrania.

«Si Ucrania no sobrevive, que no nos sorprenda si fracasa la democracia», dijo el embajador ucraniano ante la ONU, Sergiy Kyslytsya. «Salven a Naciones Unidas, salven la democracia y defiendan los valores en los que creemos», imploró en un discurso.

Preparan proyecto de resolución

Bajo el título «La agresión armada no provocada de Rusia contra Ucrania», el proyecto de resolución que será sometido a votación de la Asamblea, impulsado por los europeos en coordinación con Kiev y obtenido por la AFP, «condena en los términos más fuertes la agresión de Rusia contra Ucrania”.

El texto en el que se está trabajando, que no tiene carácter vinculante, condenaría la invasión rusa y exigiría la retirada de sus tropas.

«La guerra no es la respuesta», recordó Guterres antes de subrayar que «necesitamos paz ahora”.

El argumento ruso de la autodefensa fue categóricamente rechazado tanto por los occidentales como por la ONU, que acusa a Moscú de violar el artículo 2 de la Carta de Naciones Unidas que exige a sus miembros abstenerse de toda amenaza o recurso a la fuerza para dirimir una crisis.

ee // efe/afp