Washington enciende la alarma de una invasión inminente de Rusia a Ucrania

Estados Unidos afirmó el viernes que Rusia puede invadir a Ucrania antes de que finalicen los Juegos Olímpicos el 20 de febrero, lo que despierta el fantasma de una nueva guerra en el continente europeo, a pesar de la intensa campaña diplomática para evitarla.

La advertencia surgió en boca del consejero de la Casa Blanca para la Seguridad nacional, Jake Sullivan, tras una reunión virtual del presidente estadounidense, Joe Biden, con sus principales homólogos occidentales.



Según el funcionario «una invasión (a Ucrania) podría ocurrir en cualquier momento si Vladimir Putin decide ordenarla», agregó. «Podría comenzar durante los Juegos Olímpicos, pese a que se especula mucho que solo ocurrirá después de los Juegos». Incluso aseguro que hay una «posibilidad muy clara» de que Rusia invada a Ucrania, pero desconoce si el líder ruso tomó la «decisión final».

La perspectiva de una invasión rusa impulsó una conversación telefónica entre Joe Biden y su homólogo ruso, Vladimir Putin, prevista para este sábado.

El viernes el jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, reitero a su homólogo ucraniano, Dmytro Kouleba, que Ucrania tiene el «respaldo duradero e inquebrantable de Estados Unidos».

Unos 3.000 soldados estadounidenses serán desplegados en Polonia «en los próximos días», anunció otro alto funcionario estadounidense.

En tanto, el presidente francés, Emmanuel Macron, hablará con Putin el sábado a mediodía, según el Elíseo, antes de que visite Moscú el canciller alemán, Olaf Scholz, a principios de la semana próxima.

La situación es de extrema tensión entre los socios europeos que han multiplicado los esfuerzos diplomáticos para evitar que esta crisis degenere en guerra.

Dialogo estéril

El viernes, el Kremlin indicó que los diálogos de la víspera iniciados en Berlín con representantes de Rusia, Ucrania, Alemania y Francia no produjeron «ningún resultado».

Estas discusiones estaban relacionadas con el conflicto en el este de Ucrania que opone desde 2014 a separatistas apoyados por Rusia y al ejército ucraniano, y dejó más de 14.000 muertos. Duraron unas 10 horas y fueron «difíciles», según fuentes cercanas a los negociadores franceses y alemanes.

De momento, Rusia, que anexionó la península de Crimea en 2014, sigue negando cualquier intención bélica hacia Ucrania, pero condiciona la desescalada a que la OTAN le asegure que ese país nunca será incorporado a la Alianza militar transatlántica. Una condición que los occidentales consideran inaceptable.

La Casa Blanca se felicitó por la unidad «notable» de los occidentales frente a los que consideran como el momento más peligroso para Europa desde el fin de la Guerra Fría, hace treinta años, y esbozó un escenario dramático en caso de ofensiva rusa.

Esta podría comenzar con un «bombardeo aéreo y ataques con misiles que obviamente matarían a civiles», dijo Sullivan a la prensa. También podría incluir un «asalto rápido» contra Kiev.

El consejero exhortó a los ciudadanos estadounidenses a abandonar Ucrania «en las próximas 24 a 48 horas».

Con AFP

Radio Francia Internacional