Policía y familiares acusaron a la fiscal Jordán de no aprehender al principal sospechoso del feminicidio de Vania. Ayer -un mes después del crimen- detuvieron al padre.
Luis Escóbar
El teniente coronel del Ejército Iván L.I. fue detenido ayer acusado de ser coautor del feminicidio de Vania Trujillo. Su hijo, Vladimir I., es el principal implicado de este crimen y está prófugo. La familia de la víctima y el comandante de la Policía acusaron de “negligente” a la fiscal Dubraska Jordán, quien permitió la huida del agresor y ayer fue apartada del proceso.
“Hoy (ayer) se procedió a la aprehensión del padre del supuesto feminicida, toda vez que se hallaron elementos para determinar el grado de coautoría en el delito de feminicidio. Tenemos entendido que él es teniente coronel. Por ello en inmediaciones donde él realizaba sus funciones se procedió a la aprehensión”, dijo ayer por la tarde la coordinadora de fiscales de La Paz, Nilda Calle.
El crimen ocurrió el 18 de febrero en la casa de la pareja, en la zona de San Antonio, y donde también vivía el padre del acusado. La fiscal Dubraska Jordán afirmó que conoció el hecho a las dos de la madrugada del 19 de febrero gracias a un informe de intervención policial directa.
“La Policía, cuando me comunicó sobre este hecho, dice que es un suicidio. (…) En el acta del levantamiento (del cadáver) el médico forense dice: posible causa de muerte intoxicación por ingesta desconocida”, explicó la fiscal Jordán.
La madre llegó hasta el domicilio de la pareja y encontró a su hija en ropa interior. No podía creer lo que sucedió y entre la lucha por dominar su angustia y el llanto, pidió a la fiscal que detenga a la pareja de su hija. “Nos sacó de la habitación y pese a que había un patio, nos llevó hasta la calle. Me dijo que no me acercara y me respondió que no había evidencia. ¿Qué evidencia más quería si él vivía con mi hija? Él la mató”, relató la mamá.
La abogada de la familia, Laura Crespo, dijo que después de realizar la autopsia, el informe reveló que la causa de la muerte fue por estrangulamiento. “¿Cómo en un primer momento no se dieron cuenta que tenían marcas en el cuello, pero sí reportaron que tenía un tatuaje”, reclamó.
La profesional dijo que tres días después del crimen, el 21 de febrero (que era lunes) recién se emitió la orden de aprehensión contra Vladimir I. La abogada intentó que avance el proceso, que se active el “código rojo” para evitar que salga del país, pero no halló respuesta en ninguna institución. Por eso acudió a Mujeres Creando.
María Galindo, representante de este colectivo, recibió la denuncia y el jueves 17 de marzo fue hasta la Fiscalía -con la madre y hermana de la víctima- para encarar al fiscal departamental, Wiliams Alave, sobre el hecho y halló una “oficina vacía”.
En este interín, Galindo encontró a la fiscal Jordán, a quien le cuestionó por qué permitió la fuga del hijo del militar. En su defensa, la representante del Ministerio Público responsabilizó a la Policía de no haber reportado el estrangulamiento y permitir que escape el principal acusado.
Horas después, el comandante general de la Policía, Jhonny Aguilera, respondió a Jordán: “La fiscal no sólo es negligente, sino mentirosa y discriminadora. Nosotros tenemos 17 informes en su contra, somos parte de una persecución penal porque no permitió que la Policía actúe evacuando al cadáver, no permitió que aprehendamos al autor y espero que se efectúe un examen forense”, afirmó.
Aguilera dijo que a partir del estudio de la escena del crimen tenían los “suficientes elementos” para sospechar que el autor del hecho era el hijo del militar.
Por estas razones, Aguilera dijo que presentará una queja formal ante el fiscal general. “Tengo diferentes informes que la acusan de haber maltratado al talento humano de la Policía, tratándolos de indios e incapaces. El policía puede tener extracción humilde y no por eso vamos a tolerar este maltrato”, dijo.
Cuando Galindo cuestionó a la fiscal Jordán sobre las razones por las que no detuvo al padre del acusado de feminicidio, la autoridad respondió: “(El delito del) encubrimiento tiene una pena de dos años y no corresponde su aprehensión”, afirmó.
Ayer, la coordinadora de fiscales, Nilda Calle, aseguró que la nueva acusación es por “coautoría” de feminicidio y por ello fue aprehendido.
“Esta persona, tal vez, tenía conocimiento de los daños que se cometían contra la víctima con anterioridad, fue la primera persona que conoció el hecho, no actuó como debía ser, vino a declarar con el sindicado y procedió a ayudar a que fugue. Son hipótesis. Velando los derechos debemos continuar con las investigaciones para evidenciar si tenemos o no una participación como tal”, afirmó.
Calle informó que la fiscal Jordán ya fue cambiada del caso e indicó que en su lugar estará Juana Cortez. Agregó que “no puede informar” si seguirán acciones disciplinarias contra la autoridad acusada.