Analistas y políticos de oposición no son muy optimistas por la asunción de Gabriel Boric a la presidencia de Chile, al sostener que esa nación maneja “políticas de Estado” en lo que refiere a la integridad de su territorio. El presidente Luis Arce, luego de participar en la investidura de Boric, adelantó el viernes que sostuvo un diálogo abierto en que se abordaron el tema marítimo y del Silala.
El mandatario boliviano informó que en el encuentro bilateral se abordaron varios temas, entre ellos: “visas para funcionarios de alta jerarquía, uso de las aguas internacionales, el tema marítimo”, “problema migratorio” y un nuevo “impulso de las relaciones (bilaterales)”.
“La República de Chile al cambiar presidente no significa que su política de Estado cambie de manera significativa. Con el nuevo Presidente va a mantener la postura política, porque obviamente así son los chilenos”, refiere el analista Paul Antonio Coca.
De acuerdo con la politóloga Patricia Velasco, las relaciones con Boric pueden presentar mejoras e incluso las comisiones conformadas pueden trabajar de una manera más ágil. “El tema neurálgico y de gran importancia para Bolivia, que es el marítimo y el Silala, va a generar tensiones, por lo que los bolivianos no tenemos que hacernos muchas esperanzas”, dijo.
Agregó que Bolivia y Chile, por su vecindad, tienen que inventar una relación, un acercamiento, pero con la claridad de que el tema marítimo para los chilenos, sean de la línea política que sea, está concluido, más aún con el fallo de La Haya.
Excónsul
El excónsul de Bolivia en Chile Herman Antelo considera que no habrá cambios sustanciales con la asunción de Boric tanto en el tema marítimo como en el restablecimiento de embajadores.
“No creo que pase absolutamente nada. A veces, de manera irónica, he dicho que Bolivia tiene una relación con Chile como del enamorado camote, como dicen los cambas. El enamorado camote puede recibir 99 señales negativas, pero, si la corteja le da una positiva, se agarra con uñas y dientes de esa señal. Yo creo que somos iguales, un saludo efusivo es como si fuera a cambiar todo, pero no cambia nada. Chile tiene una política exterior definida respecto a Bolivia. La visión de
Chile es práctica. Peor con lo que pasó en La Haya. Boric tratará de hacer las cosas con amabilidad, pero cuando se toquen temas de fondo no creo que pase nada distinto a lo que estuvo pasando”, refirió el diplomático en entrevista con Asuntos Centrales.
Agregó la posibilidad de restablecer embajadores, pero que en la agenda no se contempla el tema soberanía.
Sin política
Asambleístas nacionales de oposición, de manera coincidente con los analistas, señalan que Bolivia no puede esperar un cambio radical en su política de Estado.
“Bolivia no tiene una política de Estado, a diferencia de Chile, que sí la tiene, y no se puede esperar que con esta visita del Presidente se cambie la política chilena. Chile ha sido muy claro siempre, tienen una política de Estado clara y por supuesto de los vaivenes ideológicos la política es clara”, manifestó el diputado por Comunidad Ciudadana (CC) Alejandro Reyes.
Optimistas
El ministro de Obras Públicas, Edgar Montaño, señalo que, con la llegada de Boric a la presidencia de Chile, las relaciones van a cambiar de manera radical.
Puso como ejemplo que, antes de que asuma el mandato, Bolivia dialogó con el delegado presidencial del Boric por el conflicto de los transportistas en la frontera por la pruebas anticovid, aspecto que se solucionó con la intervención del nuevo gobierno.
BOLIVIA DEBE MIRAR EL LADO DEL COMERCIO
Hace unas horas, Gabriel Boric asumió como presidente de Chile (2022-2026), dando un giro rotundo en la política de ese país y concentrando la atención y expectativa de muchos otros de la región como Bolivia. Para el politólogo y analista Franklin Pareja, el Gobierno de Luis Arce debe buscar y concretar temas y acuerdos de interés de ambas regiones como el comercio.
Para Pareja, el conflicto del mar con soberanía ya está zanjado y “nos obliga a los bolivianos a cambiar nuestra estrategia (…) En adelante, tenemos que buscar con Chile un espacio de interés compartido”.
Fuente: lostiempos.com