Día del Mar: litigio y la sentencia de La Haya alejaron a Bolivia del Pacífico

 

Expertos consideran que la judicialización del tema mar distanció más a Bolivia del país vecino. “Chile ha cerrado las puertas para tratar el tema del mar”, afirman.

Fuente: Página Siete / La Paz



Expertos coinciden en que la  judicialización de la política exterior con la demanda marítima y el fallo de la Corte Internacional de Justicia (CIJ), el cual señala que Chile no tiene la obligación con Bolivia de negociar una salida soberana al mar, alejaron a Bolivia del mar.

Hoy se conmemora el “Día del Mar”. La viceministra de Comunicación, Gabriela Alcón, adelantó que el presidente Luis Arce reiterará en su discurso que la reivindicación marítima es irrenunciable.

En octubre de 2018, luego de cinco años de juicio, la CIJ sentenció que “Chile no contrajo la obligación de negociar un acceso soberano al mar para el Estado Plurinacional de Bolivia”.

El experto en temas internacionales Álvaro Del Pozo aseveró que la judicialización de la política exterior del tema mar sólo alejó aún más a Bolivia de Chile. Agregó que en la CIJ, Bolivia no demostró que los acercamientos obligaban a Chile a negociar.

“La judicialización en nuestra agenda bilateral ha hecho que hayan distancias más largas entre Bolivia y Chile, y más desencuentros, también se perdieron oportunidades de trabajar en  temas que se requieren (…). La judicialización no le ha hecho bien a la relación bilateral y cerró el tema del mar para Chile”, aseguró el experto.

El historiador Robert Brockmann explicó que el fallo de La Haya anuló los argumentos de que las negociaciones, como la del Abrazo de Charaña y otras, sentaban un antecedente de que Chile tenía la obligación de negociar.

“Ninguno de los argumentos bolivianos fueron aceptados. Cada uno de los actos unilaterales tiene su propia historia y fracasaron. Sobre Charaña, por ejemplo, no se puede seguir construyendo porque se cerró su ciclo, y eso lo confirmó La Haya”, enfatizó.

El especialista en temas internacionales Andrés Guzmán recomendó al Gobierno manejar un discurso, sobre el tema del mar, sin generar expectativas en la población. Indicó que este asunto debe tratarse en el ámbito de la diplomacia y no como un discurso político.

“La gente espera mucho sobre lo que se dice del tema del mar, pero al final, como lo vimos con la sentencia de La Haya, se generan frustraciones para el pueblo. El juicio en  La Haya ha impactado muy fuerte en las relaciones, Chile ha cerrado las puertas para tratar el tema del mar, pero esto no será para siempre, porque aún está pendiente”, explicó.

La viceministra Alcón detalló que el discurso de Arce de hoy dejará en claro que el mar es irrenunciable. “Nosotros queremos que se vaya a reflejar el mensaje que va a dirigir nuestro presidente Luis Arce. (…) La demanda marítima es irrenunciable”, manifestó.

Demanda mal planteada

El exembajador de Bolivia ante la OEA Jaime Aparicio manifestó que la demanda marítima fue mal planteada, puesto que Bolivia sólo pedía que la CIJ disponga que Chile negocie una salida soberana al mar. Por lo cual no había necesidad de abrir un proceso.

“Hubo un error en el cálculo estratégico, era una incógnita cómo iba a responder la Corte ante un tema nuevo en el derecho internacional como son las promesas unilaterales. (…) La Corte no hubiera dicho que Chile tiene que darle una salida soberana a Bolivia, ¿para qué hemos ido a La Haya? Si el resultado favorable hubiera sido una negociación”, complementó.

La historiadora chilena Loreto Correa manifestó que Bolivia  manejó de manera poco profesional e ideologizada las relaciones diplomáticas.

“Cualquier acción de la política exterior boliviana y concentrada en la soberanía marítima es un error. Pareciera que no hubiera otro tema entre los dos países, y sí que hay muchos temas. Entonces solo mirar ese punto, que ya está zanjado, deja a Bolivia mal parada”, indicó Correa.

Chile alimentó las ilusiones

Guzmán explicó que los gobiernos chilenos también alimentaron la ilusión boliviana de tener una acceso al mar, puesto que comenzaron a tratar el asunto, pero siempre le dieron largas.

“Chile ha usado este tema para jugar con las ilusiones de los bolivianos. Durante la guerra, Chile le ofreció a Bolivia un acuerdo con soberanía, que no se dio. Esto le sirvió para neutralizar a Bolivia  o para sus intereses estratégicos. Cuando se dio el Abrazo de Charaña, Chile tenía problemas con Argentina y Perú y se acercó a Bolivia ”, enfatizó el especialista.

1
DE OCTUBRE
es la fecha en que la
Corte Internacional de Justicia
falló en contra de Bolivia.